Crecimiento, nuestro Talón de Aquiles
Señor Director:
Las perspectivas económicas para el país son pesimistas. De acuerdo con la encuesta CEP de julio, un 60% considera que la situación económica actual es mala o muy mala y los recientes datos de desempleo, no ayudan, pues este anota su undécima alza anual consecutiva, alcanzando un 8,9%. La tasa de ocupación actual hace retroceder 13 años y la de desempleo desestacionalizada es la misma de hace un poco más de dos años, siendo las mujeres quienes se llevan la peor parte, pues su tasa actual supera en casi 10 pp la masculina, acrecentando aún más la brecha de género.
La situación del mercado laboral es todavía más grave considerando que, si se hubiese mantenido la tendencia de empleo que había antes de la pandemia, hoy habría 550 mil puestos más de trabajo. Esto empeora si se tiene en cuenta la fuerza de trabajo potencial, pues al considerar a los “inactivos potencialmente activos”, se superaría el millón de personas que actualmente carecen de ingresos laborales. De hecho, CEPAL y OIT alertaron que Chile era el tercer país de la región con mayor rezago en recuperar empleo prepandemia, justo detrás de Belice y Panamá.
Como si no fuera suficiente, las proyecciones con respecto al crecimiento son también preocupantes, pues se espera que el país finalice el año en recesión. De acuerdo con estimaciones del FMI, se pronostica un decrecimiento de un 0,5% en 2023, el más bajo de la región, siendo sólo superado por Argentina.
Es así como los datos macro del país nos obligan a reconocer el actual retraso, por lo que urge una agenda económica que busque impulsar el empleo y que no sólo sea reactiva. Atentos habrá que estar acerca de la audacia que tendrá el pacto fiscal en el verdadero talón de Aquiles de Chile: volver a crecer.
Fernando Bastidas E.
Investigador Asistente CEP