En noviembre del año pasado, un banco estadounidense con amplia presencia internacional anunciaba el fin del súper ciclo de los commodities, afirmación que fundamentaba en la desaceleración de China y el aumento de los suministros.
Un punto de vista que no pasó inadvertido en su momento, pero que marca contraste con quienes sostienen que dicho súper ciclo aún tiene camino por recorrer. Lo cierto es que se trata de un debate que está vigente y que nuevamente sale a la palestra tras los efectos adversos que tuvo en el mercado la cifra de crecimiento anotada por China en el primer trimestre de este año y que con un 7,7% no cumplió con las expectativas del mercado, que esperaba un 8%.
El lunes el precio del cobre resintió con fuerza la señal de desaceleración dada por el gigante asiático -que explica el 40% de la demanda mundial del metal rojo- y anotó una baja de 5,19%. En lo que va del año, la libra de cobre -principal producto de exportación de Chile- muestra un retroceso de 8,79% hasta los
US$ 3,27 en que cerró ayer en Londres. Las proyecciones de Cochilco para el metal consideran un promedio de US$ 3,57 la libra para 2013 y de
US$ 3,32 la libra para el próximo año.
Pese al alza registrada en la jornada de ayer, la expectativa que se plantea ahora se refiere a la magnitud del ajuste en el precio de esta materia prima en el mediano y largo plazo. Por lo pronto se enciende una luz amarilla para nuestras exportaciones, pensando en la incidencia que tiene el cobre en ellas y tomando en cuenta también que algunos analistas ya anticipan que 2013 registrará el primer déficit en balanza comercial en diez años.