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Alto contrasteEl regulador de la Unión Europea ha impuesto un histórico cargo de 1.700 millones de euros
(US$ 2.300 millones) en contra de seis entidades financieras por concertarse para fijar la Tasa de Oferta Interbancaria de Londres (Libor), que es usada como referente a nivel global para cotizar activos valuados en cientos de billones de dólares, en lo que constituye la mayor multa de su historia para un caso de colusión por hechos ocurridos entre 2006 y 2007. La investigación se extendió a la manipulación de la Tasa de Oferta Interbancaria de Tokio (Tibor) y a su equivalente europeo Euribor.
La medida se enmarca en una política desplegada en los últimos años que ha puesto más atención en el sector financiero. Y es que a raíz de la crisis global de 2008-2009 -que dejó al descubierto que la regulación a nivel internacional se había ido quedando rezagada respecto de la creciente sofisticación de los mercados- las autoridades han endurecido su postura frente a los actores de la industria, con una serie de sanciones y castigos. De hecho, el comisario europeo para la Competencia, Joaquín Almunia, ha adelantado que podría haber más anuncios, a medida que aparezcan nuevas aristas vinculadas con el polémico caso de la Libor.
