El Banco Mundial y la Corporación Financiera Internacional dieron a conocer el estudio Doing Business 2013 que muestra que Chile sigue encabezando en América Latina el ranking que mide la facilidad para hacer negocios. El país, según esta medición, se ubica en la posición 37 dentro de una lista de 185 economías, puesto al que accedió tras experimentar un avance de dos lugares respecto del informe anterior.
Desagregado por ítemes, Chile destacó en atributos como “inicio de una empresa” (con el puesto 32) y “protección de los inversionistas”, con la misma ubicación. Las falencias en materia de negocios, en tanto, se encuentran en “resolución de insolvencia” (lugar 98) y “obtención de permisos de construcción” (lugar 84).
Estas evaluaciones guardan relación con la percepción generalizada de las fortalezas y debilidades del país. En efecto, Chile concede a los inversionistas sólidas garantías institucionales y, desde un tiempo a esta parte, también ha realizado importantes avances tendientes a facilitar a los emprendedores la constitución de empresas y el acceso a recursos. En el otro lado de la medalla, y pese a los numerosos diagnósticos existentes que lo han detectado, siguen siendo flancos débiles del país la institucionalidad que opera en caso de quiebra o insolvencia y los procesos burócraticos o que a la larga resultan inciertos para la ejecución de ciertas inversiones.
Si el país quiere avanzar o no retroceder en este tipo de mediciones, que muestra que la región está activa en la mejora de las regulaciones pro negocios, debe pasar a la acción decidida, en especial en las áreas donde los diagnósticos ya existen.