Equidad salarial y tecnología

La participación de las mujeres en el mercado laboral ha experimentado un alza significativa en América Latina y en Chile en las últimas décadas. Una de las razones que explican este incremento son los años de escolaridad de la población femenina, los que han subido de tal forma que en algunos casos incluso superan a los de los hombres.

Sin embargo, un asunto aún pendiente, y pese a que existen diversas políticas públicas que persiguen mejorar las condiciones en que las mujeres acceden al mercado del trabajo, es que persisten varias dificultades para lograr una igualdad en las oportunidades de hombres y mujeres. Una de ellas es la brecha salarial que, según ratifican varios estudios, perjudica a las mujeres en todos los tramos de escolaridad, capacitación y tipo de ocupación.

Un dato: de acuerdo a cifras de la Superintendencia de Pensiones, a agosto de este año el ingreso promedio imponible de los hombres que cotizan en las AFP es de $ 792 mil, mientras que el de las mujeres es de $ 690 mil, una diferencia de $ 102 mil.

El estudio Getting to Equal, de la consultora Accenture, publicado en nuestra edición de ayer, señala que las mujeres que se gradúen de universidades en países desarrollados en 2020 serán la primera generación que alcanzará la equidad de salario en su vida profesional y establece que el desarrollo de talentos digitales es clave para acortar esta distancia. La tecnología es una herramienta eficaz para, por ejemplo, capacitarse.

Es claro, en todo caso, que el desarrollo digital es un buen aliado para un mayor y mejor acceso de las mujeres al mundo laboral, pero no sustituye la importancia de un cambio cultural que valore la inserción laboral femenina y elimine cualquier atisbo de discriminación o prejuicio.