Editorial

Aprovechar las cifras

Para un gobierno que, en lo sustancial, prometió crecimiento económico, generación de empleo y mayor seguridad ciudadana, las cifras aparecidas en los últimos días deberían constituir una señal más que potente para conseguir la aprobación de la opinión pública.

  • T+
  • T-

Compartir

Para un gobierno que, en lo sustancial, prometió crecimiento económico, generación de empleo y mayor seguridad ciudadana, las cifras aparecidas en los últimos días deberían constituir una señal más que potente para conseguir la aprobación de la opinión pública.



Mientras la economía creció en febrero sobre el 7% y, según el ministro de Hacienda, a este ritmo cerrará el primer trimestre con un incremento de 8%, otros indicadores, como los más de 400 mil empleos generados el año pasado, dan cuenta de un desempeño vigoroso y sostenido, tanto en materia de inversión como de consumo. Por cierto que surgen amenazas, como la inflación, pero las encuestas de expectativas económicas dejan en evidencia un panorama igualmente auspicioso.

Se podrá argumentar que este crecimiento forma parte de un ciclo económico, caracterizado -entre otros elementos- por un precio récord del cobre, pero ni siquiera ese argumento podrá dejar de reconocer el impacto que provocan, en el crecimiento y en las expectativas futuas, las políticas implementadas durante este año de administración.

En otras materias, como el control de la seguridad ciudada, recientes estudios revelan una caída significativa en la victimización.

Sorprende, por lo mismo, que el gobierno mantenga en marzo un nivel de aprobación (43%) inferior al rechazo (50%), en proporción similar al apoyo (42%) y desapobación (49%) a la gestión del presidente Sebastián Piñera. Sorprende que dos elementos tradicionalmente claves en la evaluación popular, como son la economía y el empleo, no se traduzcan en un mayor respaldo al Ejecutivo y menos cuando se han dado, adicionalmente, en el marco de una recargada agenda de anuncios sociales, como la extensión del post natal, la puesta en marcha preliminar del ingreso ético familiar y la eliminación parcial del cobro de 7% de cotización de salud a los pensionados de menores recursos.

Quizás el problema radica, precisamente, en esta suerte de exceso de anuncios que dificultan la completa asimilación de cada uno. Tampoco ayuda a la evaluación gubernamental el entrampamiento en polémicas políticas que requieren soluciones más rápidas, como el caso de la intendenta del Biobío.

Independiente del gobierno de turno, para la economía es sano contar con una opinión pública que valore los avances, la estabilidad y la creación de nuevas oportunidades. Todo ello aporta a las expectativas y a la consolidación del sistema. Por lo mismo, el llamado es a aprovechar las cifras económicas y potenciar su reconocimiento por parte de la ciudadanía.

Lo más leído