Chile está viviendo un momento histórico en materia de atracción de inversión extranjera. Al tercer trimestre de este año, la inversión extranjera directa (IED) ingresada al país alcanzó los US$ 17.758 millones, superando en un 62,7% el monto registrado durante igual período de 2011, equivalente a
US$ 10.913 millones. Esta cifra supera el total de IED recibido durante todo 2011, cuando alcanzó los US$ 17.299 millones, lo cual constituyó el récord histórico hasta ese minuto de inversión extranjera ingresada a Chile.
Estas cifras nos posicionan en un lugar de liderazgo a nivel mundial en materia de atracción de inversión extranjera. El Informe Mundial de Inversiones publicado por Naciones Unidas en 2012 ubicó a Chile en el sexto lugar a nivel mundial en atracción de inversión extranjera como porcentaje del PIB, con un promedio para el período 2009- 2011 de 7,6% del PIB. Este año, la inversión extranjera directa en Chile podría superar el 8% del PIB.
Este año, además, en el marco de la Agenda de Impulso Competitivo liderada por el Ministerio de Economía, se implementó una medida destinada a hacer más eficientes los recursos públicos destinados a la promoción de Chile en el exterior. En este marco, se puso fin al programa InvestChile de Corfo y se consolidó en el CIE las labores de agencia única de atracción de inversiones extranjeras de Chile. Estos cambios tienen por objeto evitar la duplicación de esfuerzos de las labores de atracción de inversiones y así consolidar una ventanilla única de atención a los inversionistas extranjeros en sus relaciones con el Gobierno. Como consecuencia de este nuevo diseño institucional, hemos atendido desde principios de este año a la fecha a 304 empresas provenientes de 37 países.
Para coordinar las acciones tendientes a favorecer el ingreso de capitales extranjeros al país, este año se creó el Consejo de Atracción de Inversiones Extranjeras. Este órgano consultivo público-privado está presidido por el CIE e integrado por ProChile, Corfo y Fundación Imagen de Chile, además de representantes del sector privado.
Estamos confiados en que las cifras de inversión extranjera continuarán siendo favorables durante los próximos años. Prueba de ello es que hasta octubre de este año, el Comité de Inversiones Extranjeras (CIE) aprobó 69 solicitudes de inversión vía D.L. 600, por un monto de US$16.764 millones, un 21,6% más que el total aprobado por la institución durante 2011, año en que se había registrado el récord histórico de solicitudes con un monto de US$ 13.790 millones. Esperamos que estas inversiones se materialicen en el mediano plazo.
Pero los logros de nuestro país en materia de atracción de IED, más que una invitación a celebrar, son una señal para seguir trabajando. En este sentido el CIE dio inicio a una nueva estrategia para potenciar la presencia de IED en regiones, que tiene como propósito implementar mecanismos para facilitar la atención de inversionistas extranjeros, promover las ventajas comparativas de las distintas regiones del país para la inversión extranjera y elaborar una cartera de proyectos para canalizar las oportunidades que cada zona del país ofrece. La iniciativa es liderada por los Seremi de Economía y agrupa a las regiones de manera organizacional en cuatro macrozonas: Norte (Región de Arica y Parinacota hasta la Región de Coquimbo) Centro (Región de Valparaíso hasta la Región del Maule); Sur (Región del Bío Bío hasta la Región de Los Lagos); y Austral (regiones de Aysén y Magallanes).
La inversión extranjera trae enormes beneficios para los países, como creación de empleo, transferencia de tecnología, favorece el emprendimiento y la innovación, apoya el desarrollo de otras industrias y ayuda a reducir los precios al consumidor al aumentar la competencia. Por este motivo, la competencia de los países por atraerla es activa e intensa. En esta carrera, Chile lleva hoy una posición de ventaja, no sólo a nivel regional sino mundial.