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Alto contrasteUna vez más, Chile fue incluido en la Lista Roja o “Priority Watch List” del gobierno de Estados Unidos, por no respetar los derechos de propiedad intelectual.
Una de las piedras de tope para explicar nuestra permanencia en esta lista es la inexistencia de un sistema de Patent Linkage, una de las obligaciones asumidas por Chile al suscribir el Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos.
Este acuerdo obliga expresamente a negar autorización de comercialización a cualquier tercero antes del vencimiento del plazo de vigencia de una patente. El tratado impone la necesidad de establecer un vínculo entre la autoridad de patentes –Instituto Nacional de Propiedad Industrial- y la autoridad sanitaria -Instituto de Salud Pública-, con el fin de negar la autorización o registro sanitario que se pida en relación a productos que se vinculen con patentes vigentes. Actualmente en Chile no existe esta vinculación.
En enero de 2012 se envió un proyecto de ley al Congreso, que pretende implementar un sistema de “Patent Linkage” referido exclusivamente a nuevos principios activos, con el fin de mejorar la situación de Chile en esta materia.
Un año más tarde, un grupo de parlamentarios presentó ante el Tribunal Constitucional un requerimiento de inconstitucionalidad contra el proyecto. Se argumentó que se atentaría contra el principio de igualdad ante la ley, al privilegiar los titulares de patentes, lo que vulneraría el debido proceso al presumirse la culpable de infracción a quien solicita un registro sanitario de un principio activo que cuenta con patente vigente y se afectaría el derecho de protección de la salud al dificultar el acceso a determinados medicamentos.
Recientemente, el Tribunal Constitucional ha rechazado en forma unánime el requerimiento presentado, dejando el proyecto en condiciones de retomar su tramitación normal ante el Congreso.
No obstante, dado que nos encontramos en un año electoral y se trata de un tema más bien polémico y con posiciones cruzadas, las posibilidades de que se le dé la urgencia necesaria se ven escasas. Obviamente, mientras no se resuelva esta “piedra de tope”, difícilmente podemos liberarnos de la famosa Lista Roja.
