La letra grande del posnatal
Chile enfrenta hoy una fuerte caída en la tasa de natalidad y una importante feminización de la pobreza...
Chile enfrenta hoy una fuerte caída en la tasa de natalidad y una importante feminización de la pobreza. Para revertirlos habría que fijar la mirada en quienes han sido exitosos para enfrentar esta disyuntiva: Los países nórdicos. Efectivamente, al igual que Chile, éstos sufrieron una fuerte disminución de la tasa de natalidad y debieron enfrentar la masiva incorporación de la mujer al mundo del trabajo. Dichos países tomaron cuatro iniciativas concretas: extendieron el permiso de posnatal; incentivaron fuertemente la corresponsabilidad de padres y madres en el trabajo y la familia; ampliaron la cobertura de cuidado infantil en etapa preescolar y escolar; y optaron por desarrollar mercados laborales más flexibles, humanos y meritocráticos.
La discusión de la extensión del posnatal a seis meses en nuestro país nos permitirá avanzar de manera importante en uno de estos factores claves. El proyecto enviado por el gobierno del presidente Sebastián Piñera es el resultado de un tremendo esfuerzo. No sólo duplica el permiso actual de posnatal de tres a seis meses, sino que incorpora la flexibilización, aumenta la participación del padre en la crianza, entrega el beneficio a los padres que adoptan hijos mayores de seis meses, e incluye medidas que reducen rigideces y propician el empleo femenino.
Este gran proyecto no sólo cumple con la promesa de campaña sino que va mucho más allá: con letra grande extiende este beneficio a 100 mil nuevas mujeres trabajadoras que hoy no tienen derecho a un solo día de posnatal. Asimismo, focaliza los beneficios en las mujeres de clase media (actualmente lo hace en las de más recursos), pues son ellas las principales trabajadoras de nuestro país. Además, entrega a todas las madres trabajadoras, independientemente del monto de su remuneración, la posibilidad de complementar su subsidio, pactando jornadas parciales con su empleador, hasta igualar el ingreso que tenían el día antes de irse de prenatal.
En relación al fuero, es importante destacar que el proyecto busca equilibrar el mejor cuidado del recién nacido y la posibilidad real de la madre de reincorporarse en el mercado laboral. Hoy Chile tiene el fuero más largo del mundo, por lejos: 24 meses. El proyecto mantiene el fuero desde que la mujer se embaraza hasta cumplidoun año de vida del hijo, es decir, 21 meses (Seguiría siendo el fuero más largo del mundo). Cabe subrayar que la rigidez del fuero maternal actual es una de las principales causas de desempleo femenino en Chile; una traba que esta propuesta busca flexibilizar.
En cuanto a que afectará el empleo, lo cierto es que el proyecto transparenta un costo que ya está incorporado en el mercado laboral. Hoy las mujeres de nuestro país se toman un posnatal efectivo de cinco meses y medio mediante el uso, mayoritariamente abusivo y fraudulento, de la licencia por enfermedad grave del hijo menor de un año. De los US$ 186 millones que gasta el fisco en estas licencias, el 70% se paga entre el tercer y sexto mes de vida del niño. El proyecto entrega certeza a los empleadores sobre cuándo volverá la madre a trabajar, mediante mecanismos que evitan el abuso de las licencias por enfermedad grave del hijo menor de un año. También se elimina el trámite de desafuero para los contratos a plazo fijo y por obra o faena.
De no aprobarse la idea de legislar sobre el proyecto de extensión de posnatal este miércoles, la iniciativa deberá esperar todo un año antes de volver al Congreso y, esas 100 mil madres que por primera vez se incorporarían a este beneficio, no podrán gozar de él.
Discutamos el proyecto, pero donde corresponde: en el Congreso. Este tremendo esfuerzo que ha hecho el gobierno, como todo proyecto, es susceptible de ser perfeccionado. Pero no demoremos más la discusión de este primer paso para alcanzar el difícil anhelo de compatibilizar familia y trabajo. Para avanzar hacia una sociedad más moderna, justa y desarrollada en la cual ser madre no sea un impedimento para trabajar, ni trabajar sea un impedimento para ser una buena madre. Esperamos que se apruebe la idea de legislar para así, empezar a trabajar.