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Alto contraste
Abril es sinónimo de Operación Renta. Un mes en que la declaración de impuestos se vuelve el foco principal de empresas, asesores y contribuyentes en general. Sin embargo, no debe pasarse por alto otro hito importante para este mes: el plazo para optar o modificar el régimen tributario bajo el cual tributan las empresas.
En este contexto, cobra relevancia el análisis respecto de la conveniencia y procedencia de permanecer o cambiar entre el régimen general del artículo 14 A de la Ley sobre Impuesto a la Renta y el régimen Pro Pyme del artículo 14 D N°3. Este último, como su nombre lo indica, fue diseñado pensando en pequeñas y medianas empresas, otorgando beneficios relevantes como una tasa de impuesto de primera categoría del 25% (con negociaciones para una reducción permanente al 15%), la no aplicación de la restitución del 35% en los retiros, y la determinación de la base imponible en base a flujo de caja, entre otros.
Sin embargo, estos beneficios están condicionados al cumplimiento de ciertos requisitos, los cuales, de no cumplirse, pueden generar graves contingencias tributarias. Permanecer en el régimen Pro Pyme sin cumplir con los requisitos legales puede derivar en observaciones por parte del SII, con el consiguiente riesgo de liquidaciones y sanciones.
Por otro lado, se podría presentar la situación inversa en donde contribuyentes que sí cumplen con los requisitos para acogerse al régimen Pro Pyme no se han acogido, perdiendo así la oportunidad de acceder a un tratamiento tributario más favorable.
Por lo anterior, no solo es importante optar de manera oportuna por un régimen tributario adecuado, sino también revisar cada año si la empresa sigue cumpliendo con las condiciones exigidas por la ley. La correcta evaluación puede hacer una gran diferencia, tanto en el cumplimiento normativo como en la carga tributaria final.
Así las cosas, este mes, además de centrarse la operación renta, es fundamental detenerse a evaluar si la empresa está en el régimen tributario adecuado. No hacerlo puede resultar más caro de lo que se piensa.
