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Alto contrasteDefensores de la libertad
Hace poco, un chileno escribía en una columna que “la derrota de la libertad no se debe a la fuerza de sus enemigos, sino que a la debilidad de sus defensores”...
Hace poco, un chileno escribía en una columna que “la derrota de la libertad no se debe a la fuerza de sus enemigos, sino que a la debilidad de sus defensores”. Se trataba de Felipe Cubillos, empresario y director de “Desafío levantemos Chile”, fallecido en el accidente de Juan Fernández. ¡Cuánta falta hacen más como él en nuestro país!
Necesitamos empresarios, solidarios, que desde la sociedad civil ayuden a construir un Chile mejor. Que generen empleos y se la jueguen por un país que tiene muchas iniciativas notables, a veces opacadas por la propaganda y la falta de convicciones. Cubillos era la cara visible de esos empresarios. Su vida fue un testimonio del ejercicio de la libertad pensando en la solución de los problemas, más que en una determinada facción política. Frente al terremoto, le dedicó infinitas horas a la reconstrucción, sin esperar nada a cambio, con el solo propósito de aportar a Chile. La mayoría de su labor de reconstrucción se centró en los colegios y jardines infantiles.
Podemos aprender de su vida que las buenas ideas deben seguirse hasta el final y que más que estar frente a las cámaras en la inauguración de los proyectos, es mejor ser el que silenciosamente pone la última piedra. ¡Cuán distinto sería el debate en material educacional desde esta perspectiva! Hoy día existen iniciativas como “Refueza Chile” o “Enseña Chile”, que intentan permanentemente solucionar el problema educacional más que sólo discutirlo; jóvenes que hacen clases en colegios vulnerables otorgando una solución directa al problema de esos alumnos.
Decía también Cubillos en esa misma columna, que era un indignado. Que no entendía cómo ahora “estudiantes” destruían escuelas, después de todo el tiempo que él estuvo levantándolas. Desde esta perspectiva, debemos aprender a aprovechar las oportunidades, que son un verdadero privilegio. ¿Cuántos jóvenes que no tuvieron la oportunidad darían lo que fuera por estar en el lugar de muchos de los que están estudiando?
La labor de Cubillos fue un verdadero testimonio de defensa de la libertad y de las convicciones. Es en estos momentos que es necesario hacerle un homenaje, invitando a otros a que sigan su ejemplo, y recordando con Kennedy: “No te preguntes qué puede hacer tu país por ti, sino qué puedes hacer tú por tu país”.
