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Alto contrasteCodelco, un desafío pendiente
Llegó agosto, mes de la minería en Chile. Se trata de una buena ocasión para destacar la necesidad de incorporar...
Llegó agosto, mes de la minería en Chile. Se trata de una buena ocasión para destacar la necesidad de incorporar capitales privados en Codelco.
Como dijo un destacado economista, se deben tomar medidas emblemáticas para que quede claro que éste no es el quinto gobierno de la Concertación. Se trata de una medida que incrementaría la eficiencia, competitividad y gestión de la minera. Se lograría una mayor transparencia y se permitiría el financiamiento de las inversiones que requieren sus activos potenciales. Se beneficiaría a los más pobres, más que a los sindicatos de la empresa: tan sólo un 20% de Codelco significaría para el Estado al menos
US$ 15 mil millones, cuyos intereses podrían destinarse a tres grandes pilares como son educación, vivienda y salud.
Actualmente, Codelco está limitada en su crecimiento por el accionista Estado. Es perfectamente posible seguir el exitoso modelo de Petrobras en Brasil, por el que la empresa abrió su capital, pero el gobierno mantuvo el control. El problema es que muchos se niegan siquiera a discutirlo y se ha transformado en un tema tabú: la izquierda ha logrado un gran triunfo dándole una connotación negativa a la palabra “privatizar”. Es quizás esto lo que explica en parte la impopularidad de la medida. Sin embargo, hay aquí una cuestión de principios.
El programa de este gobierno planteaba la posibilidad de dejar un porcentaje de Codelco en manos de las AFP, pero ahora se pone en duda, lo que es muy peligroso porque se transan convicciones por popularidad (además de que esta técnica no le ha funcionado hasta ahora). Esto se ve agravado porque en la vereda de enfrente, la oposición dice sin tapujos lo que piensa. Es cierto que hay limitaciones intrínsecas de la política, y que esto es una materia que requiere un consenso para materializarlo en una reforma constitucional, pero lo mínimo es defender lo que se cree. Y es quizás esta carencia lo que ha producido en parte el actual desencanto con la política.
Ojalá a futuro no se defienda sólo lo popular, sino que también lo que responde al bien del país. Transformemos y potenciemos Codelco lo antes posible, por el bien de todos los chilenos.
