Cartas

Sistemas de incentivos

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Señor Director:

Los cargos presentados por la Fiscalía Nacional Económica contra dos empresas de suministro de gas ponen de relieve la necesidad de educar a las personas del mundo de los negocios en temas éticos.

Sin abandonar la presunción de la inocencia de los implicados, podemos afirmar que los riesgos en que incurren los ejecutivos al coludirse emanan de un sistema perverso de incentivos. Con frecuencia, las empresas incentivan a que sus ejecutivos consigan el éxito financiero en el corto plazo, con poco resguardo de los intereses de mediano y largo plazo de la propia empresa y sus consumidores.

En este caso, pareciera que el daño reputacional a estas dos empresas sobrepasa el posible beneficio personal que ellos podrían haber obtenido al haberse (supuestamente) coludido. Las instituciones que educamos en negocios tenemos el deber de reforzar las claras dimensiones éticas de los sistemas de incentivos, y ser tajantes con respecto a la formación en estrategias que agreguen valor respetando las leyes que protegen a los consumidores y a los accionistas.

Juan Nagel

Director Académico del ESE Business School

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