En defensa de la negociación colectiva ramal
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Señor Director:
Diario Financiero publicó ayer (martes 24) la opinión de Tomás Flores, de Libertad y Desarrollo, en torno a la inconveniencia de la negociación colectiva ramal (NCR).
Flores plantea una lectura lapidaria de la negociación colectiva ramal, que sólo se ve en los manuales ortodoxos de economía cada día más deslegitimados, señalando que causa desempleo, problemas de productividad, que es un gorro de talla única en el que no caben todas las cabezas, etc.
En la práctica, sin embargo, un amplio rango de países ha desarrollado la NCR (habiendo distintas modalidades) y sus economías no están en desgracia. Muchos de ellos, de hecho, suelen verse como ejemplos a seguir. En los países más productivos del mundo y con mayores niveles de empleo hay NCR.
Flores omite también que la NCR ha sido la vía para desplegar sistemas de relaciones laborales “inclusivos” en donde la mayor parte de la clase trabajadora tenga contratos colectivos. No existe caso conocido donde se llegue a porcentajes de negociación colectiva elevados usando la fórmula impuesta para Chile, de la negociación exclusivamente a nivel empresas (aquí, de cada 100 asalariados/as, apenas 13 negocian).
Esto importa, ya que los sistemas inclusivos, además de ser compatibles con el crecimiento y con el empleo, tienen efectos agregados positivos en términos de la distribución del ingreso, y abren un espacio de voz a la clase trabajadora en los temas que le atañen.
Gonzalo Durán S.
Economista Fundación SOL, Académico Universidad de Chile
