Hacia una Europa más austera y disciplinada
La cumbre de líderes europeos concluyó con nuevas reglas fiscales...
La cumbre de líderes europeos concluyó con nuevas reglas fiscales, a lo que se sumó sanciones para los Estados que no las respeten.
Un acuerdo que no busca otra cosa que reforzar la disciplina fiscal de la zona, con parámetros a seguir más estrictos que permitan controlar el déficit público. Es decir, que los países logren tener más ingresos que gastos, o bien, que si necesitan recursos que los ontengan endeudándose en niveles que sean capaces de abordar y pagar.
De ahí que las nuevas reglas fiscales incluyan que el déficit estructural anual de cada Estado no podrá superar el 0,5% de su PIB, norma que además de deberá incorporar en la legislación nacional de cada país miembro.
Este punto no es menor, dado que países como España, que ya lo incorporaron a su Constitución no han estado ajenos al descontento ciudadano por haberlo hecho.
En síntesis, lo que está buscando la UE es tener un modelo que se sostenga y aplicar disciplina a los países. Una buena alternativa a largo plazo, el problema sigue estando en las medidas de corto plazo, especialmente luego que el Banco Central Europeo anunciara que no habrá compras masivas de bonos. Sin duda un tema pendiente.