Anuncio presidencial sobre Puente Chacao

En su tercera Cuenta Pública a la Nación el 21 de mayo, el presidente Sebastián Piñera dio a conocer que instruyó al ministro de Obras Públicas para que llame a una licitación internacional que presente soluciones técnicas para la construcción de un puente que contecte el continente con la Isla Grande de Chiloé, estableciendo un monto máximo de inversión de 
US$ 740 millones, cifra que, según el mandatario, asegura la rentabilidad social de un proyecto ampliamente añorado por la comunidad chilota.



De esta manera, el gobierno reactivó el plan rebautizado en 2005 como Puente Bicentenario y que fue archivado al año siguiente debido a su elevado costo, ascendente a 
US$ 923 millones, superior a los 
US$ 635 millones que el Estado estaba dispuesto a garantizar.

Según precisó después del anuncio presidencial el secretario de Estado aludido, el ministro Laurence Golborne, se trata de un proyecto viable y que podría quedar listo en un plazo de 81 meses. Las bases de la licitación, agregó, se están elaborando y se trabaja con un esquema que considera el llamado a licitación pública abierta este mismo año, solicitando el diseño y el período de construcción.

Claramente, el “techo” del límite de US$ 740 millones fija una innovación respecto a la forma como se venía manejando el proyecto, cuyos costos también han variado desde que se postergó. Pero la propuesta oficial no está exenta de desafíos. De hecho, autoridades locales han expresado inquietudes sobre la cifra máxima de inversión e incluso han hablado de un plebiscito sobre un proyecto que, a cuatro décadas del inicio de sus estudios, aún no ve la luz.