Tiempos de incertidumbre: importancia de anticiparse
Existe consenso que los tiempos que vienen son de incertidumbre...
Existe consenso que los tiempos que vienen son de incertidumbre. Cuando ello sucede adquiere mayor relevancia la permanente necesidad de incorporar en los procesos de toma de decisiones, metodologías que permitan identificar escenarios, definir alertas tempranas, mostrar potencialidades y generar certezas para resolver adecuadamente. Siempre será demasiado tarde para informarse cuando la urgencia lleve a hacerlo en forma apresurada y sin método. Esta regla no sólo es aplicable a los tiempos de crisis sino que resulta también vital para los tiempos de normalidad.
El dinamismo y la integración de Chile al mundo constituyen un factor que exige a nuestros tomadores de decisión del mundo privado y público a afinar la mirada de lo que sucede más allá de nuestras fronteras. Estamos llamados a hacer un esfuerzo metodológicamente sustentado para, por una parte, identificar a tiempo nichos donde es posible buscar asociatividad y por otra, hacer un seguimiento permanente que brinde alertas tempranas para mantener, intensificar o cautelar la relación que se ha establecido con un determinado socio.
Una muestra de la importancia que adquiere para el país apostar por emprender en otros escenarios es la inversión chilena en Colombia. En el segundo cuarto de 2011, empresas nacionales anunciaron inversión en ese país por US$ 611,5 millones, y el principal diario económico colombiano opinaba en su edición del 21 de septiembre de este año que “si hay un país que está entendiendo y aprovechando el buen momento económico por el que está pasando Colombia, ese es Chile”.
Situaciones como las descritas reflejan la importancia de incorporar a nuestra cultura en la toma de decisiones públicas y privadas los estudios que permitan tener un panorama claro de la realidad de América Latina, en particular, y del mundo en general. Ello permitiría identificar en mejor forma caminos que potencien relaciones positivas en diferentes ámbitos. Es un tema fundamental para un país como Chile, llamado a llevar sus capacidades más allá de las fronteras en beneficio de nuestro desarrollo y como aporte al crecimiento de otros países que también tengan interés en esta fórmula.
Una mirada a nuestra tradicional forma de actuar en relación a la materia muestra importantes déficits y ello conlleva peligros. Ya Séneca afirmaba: “cuando un hombre no sabe hacia dónde navega, ningún viento le es favorable”.
Esa es la razón por la cual el CEIUC, con apoyo de Conicyt y empresas privadas, ha desarrollado un método que, en lo fundamental, define escenarios futuros que contribuyen a una mejor toma de decisiones en temas de esta naturaleza.
El uso de los medios surgidos de una metodología como la ya construida permite visualizar los efectos de situaciones que de no ser previstas tiene efectos muy dañinos. A vía de ejemplo las consecuencias en la IED luego de la crisis política hondureña fueron inmediatas: a un mes del golpe de Estado el rubro de la construcción cayó en un 50%, y el comercio disminuyó un 11% y siguió cayendo hacia fines de año, mientras que el PIB tuvo el desplome más drástico de la historia reciente hondureña.
Chile ha apostado, en una dimensión geopolítica, a crear vínculos más allá de la sola vecindad real. Es vital nuestra relación con Argentina, Bolivia y Perú. Hoy somos vecinos virtuales con Colombia, Brasil, México y los países del Asia Pacífico entre otros. El tipo de relación construida requiere que quienes adoptan decisiones cuenten con información útil y verdadera en tiempo adecuado para sus procesos de análisis y resolución.
A fin de lograr tal nivel de antecedentes es fundamental generar certezas en las decisiones en un mundo donde la incertidumbre marcará la tendencia dominante de los próximos años. Aproximarse a ello con un método y usar instrumentos adecuados contribuirá a potenciar las oportunidades que Chile tiene al identificar nichos y precaverse de los peligros que encierra este nuevo tipo de relación.