Reforma tributaria e informe de la OCDE
Sebastián Guerrero V. Presidente Instituto Libertad
- T+
- T-
Sebastián Guerrero V.
Ad portas de la nueva reforma tributaria que acabamos de conocer, la OCDE publicó su esperado informe sobre Chile, cuyas conclusiones son fundamentales para el debate venidero. Independientemente de la polémica sobre la metodología utilizada para contabilizar las contribuciones de la seguridad social, la recaudación tributaria de Chile con relación al PIB está por debajo del promedio de los países de la OCDE. La discusión, por lo tanto, debe centrarse tanto en la necesidad de aumentar la carga tributaria, como en la forma y oportunidad de hacerlo.
El gobierno destaca algunas de las observaciones del informe de la OCDE, pero omite otras tan o más importantes. El informe señala que la recaudación tributaria de Chile está concentrada en el IVA y en el impuesto corporativo (primera categoría). Asimismo, señala expresamente que las tasas de impuestos del IVA, corporativos y personales son similares a los países de la OCDE, destacando que el corporativo en Chile es de los más altos del organismo (27%), habiendo aumentado en los últimos años en un 15%, cuando la tendencia de los demás países fue bajar a un promedio de 23,5%.
“La OCDE dice que el problema de recaudación fiscal no está en las tasas ni en crear nuevos impuestos, sino en ampliar la base de quienes pagan impuestos personales en Chile”.
Por otra parte, señala que Chile tiene una baja recaudación por impuestos personales e impuestos al capital, fundado en que el 76% de los chilenos está exento del pago de impuestos personales. En ese sentido, enfatiza que el problema de recaudación no está en las tasas impositivas -ni menos en la necesidad de crear nuevos impuestos-, sino en ampliar el número de personas que pagan impuestos personales en Chile, que es particularmente bajo en comparación a los países OCDE.
La base impositiva se puede aumentar ampliando la base de quienes están obligados a pagar impuestos personales (hoy están exentos los ingresos mensuales inferiores a 13,5 UTM, equivalente a $786.348), o bien estableciendo nuevos tramos entre los que actualmente pagan impuestos personales para así llegar más rápido al tramo superior del 40%.
Por tanto, siguiendo la recomendación de la OCDE, el aumento real de la recaudación tributaria debiera ir por esa vía y no por la de crear nuevos impuestos, como por ejemplo al patrimonio, un tributo cuya recaudación es baja, su fiscalización cara y que incentiva a sacar el patrimonio de Chile, con las consecuentes externalidades negativas que aquello implica.
Adicionalmente, hay dos ideas que la OCDE señala con absoluta claridad: primero, reafirma que el aumento de la actividad económica es sinónimo de aumento en la recaudación, algo muy obvio, pero que parece no serlo para algunos sectores en nuestro país. Si queremos aumentar la recaudación tributaria, no podemos desatender la reactivación de la economía mediante incentivos a la inversión y a la actividad productiva. Un punto de crecimiento del PIB implica un punto más de recaudación, según la OCDE.
Luego, el informe es taxativo: sólo una vez que la recuperación de la pandemia sea firme, habrá espacio para aumentar la recaudación tributaria. Entonces, ¿es este el mejor momento para hacer una Reforma Tributaria?