Los desafíos de la Acción Climática

Felipe Larraín

Esta semana como Ministerio de Hacienda hemos estado trabajando en varios frentes. Por el lado legislativo, el foco ha estado en una serie de proyectos, entre ellos la Modernización Tributaria (MT) que tuvo una exitosa aprobación ayer en la Cámara de Diputados, y pasó al Senado. Pero además hemos dado pasos importantes en iniciativas para combatir el cambio climático, tema que nos preocupa y ocupa, dado sus efectos palpables en el mundo y en Chile, lo que demanda un accionar inmediato, responsable y coordinado.

En el último tiempo hemos sido testigos de una serie de eventos extremos a nivel mundial. Según el National Oceanic and Atmospheric Administration (NOOA), el pasado julio la temperatura promedio mundial fue la más alta en 140 años de registro, marcando un incremento de 1ºC por encima del promedio global. En Chile, según el Climate Impact Lab de las Universidades de Chicago, Berkeley, Rutgers y el Rhodium group, la Región Metropolitana incrementó el número de días con temperaturas iguales o superiores a 32ºC de 47 a 62 al año, entre los años 1980 y 2018, respectivamente. Esta realidad se observó, por ejemplo, el primer trimestre de este año con las lluvias en el norte del país en plena época seca, lo que golpeó duramente la producción minera. De igual manera, estamos sufriendo la sequía más grande en los últimos 60 años en la zona centro del país, con un déficit de lluvias de 70%.

Más allá de estos hechos, hay evidencia empírica de efectos cuantificados del cambio climático en salud, agricultura, empleo, energía, infraestructura costera y migración.

Ante este escenario, estamos dando pasos concretos, como: i) liderar la coalición de Ministros de Finanzas para la Acción Climática junto a más de 40 países que comparten estrategias de política económica para enfrentar el cambio climático. ii) Financiar medidas ambientales y energéticas a través de la emisión del primer bono soberano verde. Este obtuvo tasas históricamente bajas y una demanda que muestra el apetito del mercado por estos proyectos. iii) La inauguración de una mesa público privada en Finanzas Verdes que está trabajando para definir una hoja de ruta con hitos a partir de 2020, lo que se enmarca en la Estrategia Nacional de Financiamiento del Cambio Climático. IV) La modificación del Impuesto Verde, eliminando el sesgo tecnológico, incorporando gradualidad como parte de las medidas adicionales en el proyecto de Modernización Tributaria, priorizando el objetivo ambiental por encima del recaudatorio, con la posibilidad de compensación (offsets) para contaminantes globales y locales.

Este martes, además, concretamos un importante hito: la suscripción de un Acuerdo de Cooperación con el Programa de Naciones Unidad para el Desarrollo (PNUD), que permitirá que Chile cuente con una metodología para identificar el gasto público y privado para la Acción Climática. Tal como lo planteó el PNUD es clave contar con una acción estatal coordinada y planificada para poder tomar medidas que sean basadas en evidencia y para eso es esencial tener una media sobre cuánto los países invierten en Acción Climática. Creemos que toda política pública y cambio deben ser impulsados con base a la mejor información basada en datos.

En este camino, la cumbre COP 25 que se realizará en diciembre de este año en nuestro país es un hito trascendental hacia un desarrollo sustentable, lo que sin duda mejorará la vida de todos los chilenos.