Columnistas

Cuentas en dólares: ¿algo malo?

Enrique Marshall Director Magíster en Banca y Mercados Financieros PUCV, Exvicepresidente del Banco Central

Por: Enrique Marshall | Publicado: Miércoles 12 de octubre de 2022 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Enrique Marshall

Las cuentas en dólares en el sistema bancario local han experimentado un significativo crecimiento en el último tiempo, alcanzando un nivel 35 mil millones de dólares, el más alto desde que existen registros. Este movimiento ha despertado la atención de los analistas y la opinión pública.

¿Hay algo malo en todo esto? Ciertamente que no.

Por de pronto, se debe alejar un prejuicio que aún merodea entre nosotros. Es el de que la tenencia de dólares constituye un acto indebido e incluso de connotaciones antipatrióticas. Esta es una idea engendrada en tiempos pretéritos, marcados por una economía cerrada y sometida a fuertes restricciones cambiarias. Se entendía entonces que todos los dólares eran de la autoridad.

“La evolución de los saldos bancarios en dólares no debe despertar preocupación. Es más, refleja implícitamente que el sistema financiero local goza de buena salud”.

Afortunadamente, esa es una visión superada. La economía se ha abierto y las actividades económicas se han “dolarizado”, por decirlo de alguna manera, aunque ello no es siempre bien advertido, porque los pagos en moneda extranjera proceden en forma automática a través de tarjetas bancarias, transferencias u otros medios.

En el ámbito del comercio exterior, las cifras hablan por sí solas. La suma de exportaciones e importaciones llega hoy a un nivel equivalente al 55% del PIB. Parece razonable, entonces, que los saldos líquidos en moneda extranjera en el sistema financiero alcancen la magnitud señalada, que equivale solamente al 12% del PIB.

En el ámbito de las inversiones también podemos observar una significativa “dolarización”. Los activos de los chilenos en el exterior han crecido en forma importante, alcanzando una suma que se empina a los 440 mil millones de dólares, según la posición internacional informada por el Banco Central. Estas inversiones son realizadas por los fondos de pensiones, en representación de millones de afiliados, pero también por las compañías de seguros, los fondos y las empresas que han efectuado inversiones productivas directas en otros países, principalmente en América Latina.

En ese contexto, saldos líquidos en dólares por 35 mil millones no deben llamar la atención. Es cierto que los niveles se han acelerado en esta coyuntura, pero ello es perfectamente explicable por los niveles de incertidumbre, la fuerza apreciativa del dólar a nivel global y los altos niveles inflacionarios locales. En lo fundamental, este movimiento debe entenderse como precautorio o de refugio frente a turbulencias financieras.

En suma, la evolución de los saldos bancarios en dólares no debe despertar preocupación. Se trata de un desarrollo normal, que incluso admite una lectura positiva. Los tenedores de las cuentas han recurrido al sistema financiero local, reconociendo implícitamente que éste goza de buena salud. Si no fuese así, los saldos habrían disminuido y los dólares se habrían traslado directamente al exterior.

Lo más leído