Lo que temía el ridiculizado 20%
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Señora Directora:
La inflación reduce el contenido informativo de los precios dificultando la toma de decisiones de consumo e inversión, reduciendo así el bienestar general de la población. Con un IPC del 1,9% (récord desde 1993) y una inflación del 9,4% (récord desde 2008), parece imposible que el Banco Central logre su meta.
Así, mientras la temida inflación golpea a la canasta básica, la necesaria inversión privada continua su éxodo masivo, refugiándose en cuentas corrientes en dólares con récords históricos, según la CMF, postergando decisiones de inversión local de manera indefinida, o bien, migrando hacia países con mayores certezas.
El alza en los precios está estrechamente relacionada con el malestar social e inestabilidad política, ambas rebosantes a nivel nacional. Pese a esto, y con una reciente aprobación de solo el 40% y una desconfianza del 55% (CADEM abril), la flamante Convención Constitucional insiste en promover medidas que solo vienen a agravar esta situación.
¿Acaso ese ridiculizado 20% del Rechazo solo temía perder sus “privilegios” en un intento egoísta de protección, o bien,tenían preocupaciones fundadas respecto al futuro de la nación hoy evidentes? ¿Habrá que esperar acaso a que Chile deje de “ser digno” (nuevamente) para evidenciar el valor del crecimiento, productividad y estabilidad económica?
Guillermo Ramírez Sneberger
Presidente de Cambridge Business Association (CBA)