Señor Director:
Con mucho agrado he leído el comentario publicado ayer del señor Eduardo Hernández, que dice relación con la rebaja de tarifa a los adultos mayores en el Transantiago. Sin embargo, me gustaría si alguien pudiera aclarar al Metro de Santiago que adulto mayor es sobre cierta edad y que basta el carnet de identidad para acreditar tal situación y no que le exijan el carnet del ISP o INP para otorgar dicha tarifa.
Ricardo Pino Vásquez
Señor Director:
Creo que hay un amplio consenso en que $ 193.500 es un monto pequeño para una remuneración mensual. Probablemente quienes lean esto, no se encuentren ni cerca de tener ingresos de este monto y naturalmente todos desearemos que quienes hoy reciben el salario mínimo incrementen sus ingresos en una cantidad tal que permita afectar positivamente su calidad de vida.
La CUT ha señalado como cifra aceptable $ 250.000, lo que implicaría un incremento de 37,4%. No he encontrado evidencia sobre el porqué de ese número y no otro, por ejemplo $ 300.000 y menos aún una estimación de como el monto indicado afectaría al empleo actual y a la generación de nuevos empleos para la personas con menos nivel de calificación.
Para una empresa consolidada, pagar $ 11.500 e incluso $ 100.000 adicional por mes es factible; sin embargo, cuando llevamos esos montos a micro y pequeñas empresas y además lo multiplicamos por un número determinado de trabajadores, lo que obtenemos es la diferencia entre continuidad de esa empresa o su cierre. Es importante no olvidar que los que pagan salarios mínimos son las empresas de menor envergadura, que viven una etapa que aún puede considerarse nacimiento y quienes perciben esos ingresos son las personas con menor nivel de formación. Es decir ambos sectores son vulnerables y para ayudarlos de verdad se requiere responsabilidad. Responsabilidad que implica mirar con cautela los escenarios actuales y probables y seguir con la tendencia de incorporar productividad para que los salarios crezcan.
Rafael Romero Meza
Director Centro de Investigación Aplicada en Economía y Finanzas U. del Desarrollo
Señor Director:
Estamos migrando de la era del PC a la era del cloud computing, lo que se constituye como tierra de oportunidades para las industrias. Todos entramos a la nube aunque no nos damos cuenta. Algunas miradas apuntan a las compañías de telecomunicaciones por la diversidad de su oferta, su orientación hacia la conectividad y su relación con clientes tanto corporativos como usuarios finales, los que darán el puntapié inicial para que el cloud avance de forma masiva.
Hoy la portabilidad numérica y las ofertas de las distintas compañías son similares.
En la región hay empresas de telecomunicaciones que ofrecen a los usuarios Pymes escritorios virtuales, simplificando su estructura de IT. La virtualización tiene beneficios como el control de los costos, una mejor experiencia del usuario, mejor performance, movilidad y calidad de vida para los empleados. El Cloud consigue un retorno de inversión y hace posible aprovechar la amplia oferta de nuevos dispositivos móviles y escalar rápidamente, sin tener que añadir equipamiento, software ni personal. El usuario busca almacenar su información y ahí es donde las telcos brindarían un valor agregado con nubes personales. El rol de las telcos será lograr una adopción masiva de la nube y para encontrarle nuevos usos a las necesidades de los usuarios.
Hugo Werner
Director Enterprise Sales & SI’s Citrix Latinoamérica y Caribe