VER MÁS
MARKET DATA
<%userdata?.email%>
Editar perfil
Salir
(Twitter)
Instagram
Facebook
LinkedIn
YouTube
TikTok
Alto contraste
Científicos
Señor Director:
Se informa que el gobierno ha adoptado medidas para traer a investigadores científicos chilenos desde el exterior. Se sumarán a los 9.000 académicos doctorados que ejercen en la educación superior.
¿Las autoridades han impulsado a la vez la solución o mitigación de importantes deficiencias en organismos estatales, que nos afectan a todos en mayor o menor medida? Lo pertinente es no dejar rezagados asuntos de interés social, aunque abordarlos cause molestias a determinados gremios.
PATRICIO FARREN CORNEJO
El más envidiado
Señor Director:
Alemania, Israel, Turquía y Chile son los cuatro países de la OCDE que han disminuido el desempleo desde 2008. Considerando nuestras bajas tasas de inflación y corrupción, y alto crecimiento y ranking de libertad económica, deberíamos ser el más envidiado de ellos. No obstante, la CUT y un surtido de otros intervencionistas y comunistas no están contentos, prefiriendo arrastrarnos a un abismo similar de desastres vistos en Europa del Este.
Acabo de volver de Grecia, Macedonia y Bulgaria, y ninguno de estos países ha logrado éxito económico ni recuperación a través de políticas socialistas. Grecia tiene una actitud anti cliente y poco amigable, 26,8% de desempleo y muchísimos locales cerrados o por arrendar. El entorno es menos desesperante en Skopje, Macedonia, a pesar de que un trabajador típico gana sólo 250 euros mensuales ($164.000). En Bulgaria, la más pobre de la Unión Europea, ganan 300 euros fuera de la capital y 400 en ella ($262.000). Es evidente que la época dorada de Sofia fue el Siglo XIX y no ha mejorado mucho desde entonces; experimenta protestas diarias contra un gobierno supuestamente controlado por mafiosos. Países ex comunistas no tienen ganas de volver atrás. Sólo en lugares como Chile piensan muchos que “más Estado” sería mejor.
Estos países envidian a Chile. Me preguntaron varias personas cómo está nuestra calidad de vida y economía. Era país del Tercer Mundo hace 40 años, en dónde no se pensaba que alguien de clase media pudiera visitar Europa. Al contrario de lo que proclama la izquierda, ahora se pueden ver los buenos resultados de políticas de más mercado. ¿Cómo se le hace entender a algunos chilenos que su país es cada vez mejor, y que su calidad de vida está en perpetuo aumento? En Chile se venden mensualmente mil autos nuevos, mientras que en Bulgaria nuestro taxista utilizó un auto con 407.000 kilómetros. Allá hay calamidades urbanas: micros oxidadas, trenes de los 60-70, techos cayéndose y sectores “adornados” con feísimos edificios de departamentos.
Transantiago y sectores densamente poblados de Chile son maravillas en comparación. Grecia parece arruinado y sucio. Macedonia apenas es mejor. Su gente gana menos que un gremialista chileno y tiene menos esperanza.
Entonces ¿cuál es la seducción del intervencionismo?
John Cobin, Ph.D. (Public Policy)
Académico, Facultad de Economía y Negocios Universidad Andrés Bello
¿Y cuánto nos costaría?
Señor Director:
Entre las diversas propuestas que han surgido para modificar el sistema binominal, está el aumentar el número de congresistas, pero en el acto surgió la pregunta del millón: ¿Y eso, cuánto nos costaría a todos los chilenos? La sorpresa fue grande cuando se dijo, nada. ¿Pero cómo? Los mismos fondos que hoy soportan los gastos del Congreso con la dotación de senadores y diputados se redistribuirían. ¿Es que hoy día los fondos disponibles son más cuantiosos de lo que realmente necesita el Congreso para funcionar y están mal administrados? Entonces, hace tiempo que tenían el cinturón bien holgado, frente a un grupo grande de chilenos que en igual período literalmente tuvieron que empeñar el mismo para vivir. A pesar del gesto del Congreso que se ampliaría sin mayores gastos para la señora Juanita, igual surgen los cuestionamientos por la administración que se ha hecho de los dineros fiscales que tanta falta hacen para atender otros problemas a nivel nacional.
LUIS ENRIQUE SOLER MILLA
