Una buena señal
Señor Director:
La voluntad declarada por el Ministerio de Educación de replantear parte de las propuestas involucradas en el proyecto de Carrera Docente y potenciar el diálogo con los profesores es una buena señal. Parte de las manifestaciones de rechazo pasan por un mensaje que, hasta ahora, ha supuesto una desconfianza de base: hacia el actual profesorado, hacia los futuros docentes y hacia las carreras e instituciones que los estamos formando, sin distinción alguna.
En este sentido, la posibilidad de reemplazar la evaluación inicial de los egresados por un concurso público, por ejemplo, da un giro positivo al mensaje. La propuesta de las evaluaciones parte de la premisa de que los nuevos profesores egresan mal preparados; el concurso público, en cambio, apunta a reconocer a los mejores. Mientras la primera funciona con la lógica de la sanción, la segunda opera con la de los incentivos. Y éstos, sobre todo a nivel de la educación pública, aún deben crearse.
Esta mirada es la que debería constituir una prioridad para la carrera docente. Los estándares no mejorarán si los esfuerzos se concentran sólo en evitar problemas y defectos, sino en la medida en que el proyecto apunte realmente “hacia arriba”, buscando formar a los mejores, en pos de un verdadero y alto estándar de calidad.
Dra. María Gabriela Huidobro
Decana Facultad de Educación
Universidad Andrés Bello (UNAB)
Exclusividad parlamentaria
Señor Director:
Tras la salida de Jorge Insunza desde el Gobierno, varias bancadas ingresaron proyectos que buscan dar exclusividad a la labor parlamentaria, para poner por escrito lo que muchos entendíamos como el espíritu base de la función pública. La falta de visión del ex diputado profundiza un descontento y una frustración existente en la ciudadanía, quien ya no alza su voz sólo por ideologías, sino más bien por actos como este que reflejan una falta de equidad e igualdad de oportunidades en un país donde, según la Fundación para la Superación de la Pobreza, la mitad de los chilenos gana menos de $265.000 mensuales; y la mayoría (8 de cada 10) gana menos de $500.000. Hoy los ciudadanos desconfían de las instituciones, llevando un sentimiento de que siempre ganan los mismos. En su ensayo “La política como vocación”, Max Weber enuncia dos caminos: “vivir para la política o vivir de la política”. Lo primero refleja el darle un sentido a la vida, poniéndola al servicio de algo, lo mínimo para recuperar la confianza en la clase política.
La exclusividad parlamentaria es (era y será) un deber básico a cumplir, considerando las altas dietas que apuntan –precisamente– a evitar conflictos de interés y llaman a una dedicación única, en un ámbito en que la representatividad ética y moral de nuestros dirigentes no pueden jugar con “un nuevo estándar”.
Raúl Jara Guiñez
Director Escuela de Liderazgo USS
¿Mapocho navegable?
Señor Director:
Recientemente he pasado por el bonito y muy amplio Parque Fluvial Renato Poblete, rico en áreas verdes, zonas de paseo, y estanques de agua. En esto último quisiera detenerme, pues, no nos olvidemos, en algún momento estos estanques fueron el centro del proyecto del parque fluvial, también denominado como “Mapocho Navegable” por sus principales promotores.
El proyecto contempló dentro de su infraestructura tres barreras inflables instaladas frontalmente en el río Mapocho, para, según informaba el proyecto, elevar el nivel del río y así entregar mediante bocatomas aguas los estanques del parque fluvial. Sin embargo, nada de eso ha ocurrido: hoy corre un hilo de agua por el río, todas las barreras se encuentran completamente desinfladas, aguas arriba de cada una de ellas se pueden ver montones de bolones, cuantiosos sedimentos y por supuesto, mucha basura que acumularon las barreras estando infladas, y el agua para los estanques sale de quien sabe dónde, todo lo que no hace sino brindar el triste y vergonzoso espectáculo de un proyecto fluvial mal diseñado y perjudicial para el más emblemático río de la capital del país.
Juan Luis Hernández Viera
Ingeniero Civil Hidráulico