Señor Director:
La Organización Meteorológica Mundial (OMM) informó recientemente que los principales gases de efecto invernadero, causantes del calentamiento global, batieron nuevos récords durante 2010, alcanzando volúmenes nunca antes registrados desde la época preindustrial.
Dicho escenario obliga a generar un marco normativo importante para bajar la huella de carbono. Por ello, el pasado 4 de noviembre Chile fue uno de los primeros países del mundo en publicar la norma ISO 50001 de gestión energética, cuyo fin es reducir a la mitad la huella de carbono para las próximas décadas y así disminuir el efecto invernadero.
Sobre esta nueva certificación, la construcción de edificios tiene mucho que decir, y es que temas tan importantes para dicha industria como la liberación de capital, el fortalecimiento en la seguridad y la habilitación final de una empresa eficiente son totalmente complementarios con el desarrollo sustentable mediante la automatización de los inmuebles.
De esta forma, el capital destinado a la provisión de energía puede ser invertido en proyectos estratégicos, que crearían nuevas y sostenidas fuentes de ingreso en los próximos años.
Si a ello sumamos la integral protección de personas, datos e ideas, estamos hablando ya de un rendimiento operacional de excelencia, sin sumar a ello contaminación asociada.
Para el año 2030, la población mundial será un 25% más numerosa que en la actualidad y la cantidad de nuevas economías experimentará un crecimiento exponencial. La nueva Norma ISO 50001 es sólo el primer paso para adentrarnos en los desafíos que vendrán durante los próximos años, que premiará a quienes opten por el camino de la implementación y gestión eficiente.
Juan Aguedo
Director Buildings Business, Schneider-Electric Chile
Señor Director:
Conversando en el avión con uno de los principales empresarios del país, que por coincidencia le habían asignado el asiento del lado, confirmé que nuestra economía la siguen moviendo unos pocos. Narraba con entusiasmo y orgullo sus nuevos proyectos, detrás de los cuales se podía percibir más que una mera ambición, un desafío por concretar con éxito una nueva idea.
Estos “pocos” están muy debidamente informados y prácticamente no duermen ideando sus nuevos negocios. Tienen el capital y el acceso a los mercados internacionales, manejan redes estratégicas, y en definitiva no dan pasos en falso, el factor riesgo está controlado, según me comenta este señor, que se extrañó de que no lo hubiera identificado desde un comienzo.
Cada nueva oportunidad en Chile es aprovechada por uno de estos importantes grupos económicos nacionales, que crecen cada vez más, porque, además se trata de inversiones de gran magnitud que sólo ellos tienen las espaldas para participar. Así es como nos encontramos frente a un círculo vicioso, ante un escenario que irá generando cada vez mayor descontento social, traducido en manifestaciones públicas que no se detendrán y que seguirán expresando la oposición a un status quo desigual. Estoy de acuerdo en que los peces gordos se alimenten, están en su justo derecho, pero también deben dejar comer a los que nunca lo han hecho, y ¿quién regula todo esto?
Francisca Valdivia Corssen
Señor Director:
La FECH tiene nuevo presidente y ahora la señorita Camila Vallejos pasó a la vicepresidencia. ¿Qué pasará ahora con el conflicto estudiantil? ¿Seguirá agudizándose aún más o se abrirán ventanas para comenzar a ver la luz al final del túnel? Creo que por el bien de todos, sería conveniente que todas la partes se abrieran a buscar una solución. No se llegará a nada si se parte excluyendo al otro u objetando las ideas que no son las propias.
El poder político tiene mucho que decir en esto, por lo que es iluso pensar que sólo los estudiantes tienen la verdad respecto a cómo solucionar los problemas de la educación. Ellos son una parte de la solución y, de acuerdo a lo que se ha visto, de los problemas también.
Juan Carlos Villanueva