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Ingreso de fondo
Señor Director:
Por medio de la presente y en relación a la nota publicada en la edición del día viernes del diario de su dirección, bajo el título “SMU alista ingreso de fondo soberano de Singapur en próximo aumento de capital” consideramos indispensable aclarar dicha información:
a) A esta fecha SMU no ha suscrito acuerdo de inversión alguno con el Fondo Temasek ni con algún otro inversionista interesado en participar en su propiedad accionaria.
b) El aumento de capital a que alude la publicación, aprobado en Junta Extraordinaria de marzo pasado por un monto de hasta MM$ 3.040, no corresponde a SMU S.A. (sociedad matriz bajo la cual opera Unimarc y los demás formatos del retail), sino a SMU Corp (sociedad coligada de SMU S.A. emisora de la tarjeta Unimarc). En consecuencia, dicho aumento no tiene relación alguna con la incorporación de un eventual nuevo inversionista en la matriz.
c) No es efectivo, entonces, como lo señala el artículo citado que “la búsqueda de socio para SMU ya tenga nombre”, y menos que se hayan definido las condiciones en que se materializaría una eventual inversión (aporte de MMU$ 200, 10% de la propiedad, plazo de dos meses, etc) .
d) Ha sido una política permanente de SMU el respetar los acuerdos de confidencialidad que puedan existir en estos temas y por cierto cumplir con los deberes de informar a la autoridad respectiva cuando ocurran hechos esenciales que así lo ameriten.
Pilar Dañobeitía Estades , Presidenta SMU .
Tono del debate
Señor Director:
En momentos en que varios de los candidatos presidenciales de la oposición han puesto en el centro de sus propuestas de campaña la confección de una nueva Constitución –o bien, reformas profundas a la ya existente-, somos muchos los que tenemos serias aprensiones con el tenor del debate que se está instalando, sobre todo cuando vemos que miembros del comando de Michelle Bachelet están promoviendo la asamblea constituyente como un mecanismo idóneo para hacer estos cambios. Si echamos un vistazo al contexto latinoamericano de los últimos 30 años, vemos que en la gran mayoría de los países en que se han convocado asambleas constituyentes se ha hecho en momentos de alta inestabilidad política y económica; para legitimar las demandas de grupos radicalizados y, en algunos casos, para extender los mandatos de los gobiernos convocantes.
Si bien el país tiene muchas tareas en carpeta, estamos encaminados hacia el desarrollo y nuestro rumbo es envidiado por varias democracias del mundo. En la historia democrática de nuestro país las decisiones relevantes siempre han sido fruto de la deliberación o negociación en el Congreso.
Mauricio Gil S.
Demanda boliviana
Señor Director:
Quedando poco tiempo para conocer la sentencia de la Corte por la demanda peruana, un nuevo litigio contra Chile comienza por temas marítimos. Sin embargo, en esta oportunidad la evidencia histórica permite evaluar con más calma lo que enfrentará nuestro país, aventurando un proceso contencioso inadmisible o que carece de valor jurídico.
Por otro lado, en nuestro país las opiniones de firmeza y rechazo ante esta situación no se han hecho esperar, en un discurso que parece de copy paste entre ellos, basados en una oda a la soberanía. Sin embargo, hay hechos que por lo menos insinúan nuevas ideas sobre una salida al mar soberana para Bolivia, que se basan en la experiencia con el resto de países de la región con los que no se comparte frontera. Nuestras relaciones exteriores con Argentina, Perú y Bolivia en el transcurso de la historia han sido muy difíciles, por una simple razón, ‘compartimos frontera’; y el caso inverso, con quienes no hay un apego geográfico, ha fluído un trato provechoso en varios niveles. Cabe preguntarse ¿Cuál sería la relación chileno-peruana si se cediera una pequeña franja soberana a Bolivia por el límite norte eliminando así la frontera con la nación incaica? ¿Le conviene a Chile reducir el número de sus vecinos colindantes? Si bien, esa situación pasa también por la opinión peruana, resulta atractivo pensarlo.
Marcelo Berguño R.
