Laboral & Personas

Von Mühlenbrock: “Es bueno que se hable en on para que los que discrepen tengan oportunidad de discutir”

Hermann von Mühlenbrock valora que los integrantes del gremio estén dando a conocer sus opiniones públicamente, lo contrario, cree que daña a la entidad.

Por: K. Peña y D. Vásquez | Publicado: Lunes 10 de abril de 2017 a las 04:00 hrs.
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Sólo una semana pasó para que en la Sociedad de Fomento Fabril (Sofofa) se desatara la primera discusión en torno a Bernardo Larraín Matte, quien es hasta el minuto el único que ha oficializado su intención de liderar a los industriales. Gonzalo Bofill -presidente de Carozzi- lanzó críticas públicas en contra del aspirante por el vínculo que relaciona a su familia -controladora de Empresas CMPC- con el caso de la colusión del papel. Sin embargo, el actual líder del gremio, Hermann von Mühlenbrock, opta por poner paños fríos a la polémica, valorando las críticas con nombre y apellido.

Pero también analiza el escenario presidencial del país. “Cualquier candidato que hable de economía social de mercado, de independiencia del Banco Central, de gobierno subsidiario, de libertad de las personas, de libertad para emprender, de que el desarrollo lo hace el sector privado, de que los empresarios no son demonios ni son bandidos, por ese voto”, lanza.

- ¿Qué le parecen las declaraciones de Gonzalo Bofill?

- Nos sentimos tremendamente contentos si este proceso se lleva bajo este marco de respeto, pero con toda la gente hablando en on. El daño que se hace a la institución y a las personas cuando se habla en off (the record) es realmente grande. Ahí los dirigentes o los consejeros gremiales deberían imitarle a los políticos. Y, por lo tanto, una de las cosas buenas de este proceso es que todos hablan libremente y tú sabes exactamente qué dice ese señor y tienes la alternativa de rebatirle y discutir -siempre con mucho respeto-, pero sabes quién está diciendo y él se hace responsable de lo que dice.

En cambio, cuando empiezan todos estos comidillos, todos escondidos, me parece nefasto, así que hasta ahora creo que esto de hablar en on es un avance importante, que era una de las cosas que siempre insistíamos y le pedíamos a los consejeros, que hablaran en on. La democracia es eso.

- ¿Pero es prudente hacerlo a una semana que en el consejo general se anunciara hacer un proceso competitivo?

- A mí no me corresponde calificar y me voy a mantener absolutamente al margen. Solo decir que este es un proceso democrático, que la democracia es buena, nos hace bien, y que es bueno que todo el mundo hable en on para que los que discrepen de esa opinión tengan la oportunidad (de discutir). En este caso, es muy claro y se genera un debate que enriquece mucho el proceso. Lo que sí nos preocupa es que no se entre a ofender a las personas y por eso insistimos mucho en el respeto y sobre todo hablar dando la cara.

- Bofill dice que no le parece prudente que una persona como Larraín, cuya familia está ligada a un caso de colusión, sea líder de un gremio.

- Es una opinión de Gonzalo Bofill y habrá otros que tendrán que decir que les parece bien y otros que también dirán que les parece bien y me parece que es una forma de hacer un debate. No voy a ser comentarista de nadie.

- ¿Le parece que era más adecuado que Larraín se postulara en cuatro años más cuando se superara el caso CMPC?

- Yo no opino sobre los candidatos a la Sofofa.

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- ¿Cómo ve el clima electoral del país?

- Tengo la impresión de que hay más interés que en años anteriores de parte de la gente, de participar, de escuchar. Tengo la sensación de que no hay tanta apatía como se dice.

- ¿Cree que habrá una renovación de la clase política?

- No creo que haya cambios profundos, no hay nadie antisistémico, por ejemplo. No estamos ni cerca de un riesgo como en Venezuela. Hay matices, gente que está más a la izquierda que otra. Muestra de eso es que los candidatos que más marcan son los tradicionales.

- Pero Guillier no es muy tradicional.

- Él era un periodista muy famoso, siempre ha estado ligado a la política, es senador por un partido político y es parte del establishment. No es un aparecido en la política. Él no llegó de la luna y se puso a hablar de política. Nadie lo tiene por un rupturista antisistémico. Él es parte de un sistema político, un sistema político chileno que es uno de los buenos que hay y que funciona bien.

- Pero no ha dado muchas definiciones a la fecha…

- Sin tratar de defenderlo, quizá eso se podría explicar en que él aparece de repente. Quizá él se siente de verdad candidato desde fines del año pasado. Tiene que tener a gente trabajando con él, así que no consideraría como un pasivo el que aún no diga nada.

- ¿Cómo ve la relación del gobierno con el empresariado?

- No tengo nada que decir del ministro Arenas en su oportunidad o del ministro Valdés hoy. Nuestra relación con el gobierno ha sido absolutamente de respeto y bastante cordial con algunos ministros. Evidentemente, cuando uno mira, hubo un proceso de mucha reunión y que realmente fuimos oídos pero poco escuchados. Por ejemplo, en la reforma tributaria, algo pudimos influir en la reforma laboral.

- ¿Cuál será el legado de la Presidenta Bachelet?

- La Presidenta partió con muy buenas intenciones, pero con un análisis -a mi juicio- erróneo en las causalidades. Por lo tanto, trató de buscar esas soluciones con causas mal definidas, como por ejemplo con la reforma laboral.

- ¿Pero si tuviera que sintetizarlo en una frase?

- Una Presidenta con ganas de hacer cambios importantes en el país, pero que realmente no le resultaron.

-¿Una Presidenta que fracasó en su programa de gobierno?

- Puede ser dura esa expresión, la palabra fracaso es un poco ofensiva. Pero diría que le costó mucho más de lo que ellos pensaron.

- ¿Los empresarios tuvieron que ver en eso?

- Aquí hay gobierno y empresarios como también hay consumidores y trabajadores. Somos todos expectadores de las políticas públicas del gobierno. Jugamos un partido y bailamos con las reglas que pone la autoridad. Y, por lo tanto, como la guitarra se desafinó todos empezamos a bailar con una música desafinada.

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