El Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió un 0,3% en diciembre, una variación que se ubicó dentro de las expectativas del mercado, con lo que Chile cerró 2022 con una inflación anual de 12,8%, la mayor desde 1991.
Según informó el viernes el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), en diciembre destacaron las alzas de alimentos y bebidas no alcohólicas y de recreación y cultura, y el descenso de transporte.
La variación mensual de diciembre es la más baja desde febrero de 2022. El año pasado, marzo fue la variación mensual más alta cuando llegó a un 1,9%. A nivel anual, la inflación alcanzó su peak en agosto pasaso cuando llegó a 14,1%.
En el último mes del año 2022, el INE indicó que seis de las doce que conforman la canasta del IPC aportaron incidencias positivas en la variación mensual, cinco presentaron incidencias negativas y una registró nula incidencia.
Entre las divisiones con aumentos en sus precios destacó alimentos y bebidas no alcohólicas (1,1%) con 0,247 puntos porcentuales (pp.) y recreación y cultura (2,1%) con 0,138pp. Las restantes divisiones que influyeron positivamente contribuyeron con 0,126pp., en conjunto. A su vez, entre las divisiones que consignaron bajas mensuales en sus precios destacó transporte (-0,5%), que incidió -0,081pp.
El IPC sin volátiles presentó una variación mesnual de 0,3%, mientras que el IPC menos alimentos y energía lo hizo en 0,2%.

Los analistas manejaban un amplio rango para el alza en los precios en diciembre, con estimaciones que fluctuaban entre un 0,1% y un 0,7%, aunque el consenso del mercado apuntaba a una mediana de 0,2% en diciembre, de acuerdo con la encuesta de Bloomberg.
En el Informe de Política Monetaria (IPoM) de diciembre, el Banco Central esperaba que la inflación cerrará durante 2022 en 12,3%.
Chile inició el 2022 con una inflación anualizada en 7,7%, generada en parte por el relajamiento de las medidas de confinamiento por el Covid 19 y las inyecciones de liquidez a los hogares, como fueron el Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y los retiros anticipados de los fondos de pensiones, que llevaron a un fuerte aumento de la demanda por bienes.
Todo en un contexto agravado por una guerra en Ucrania, que se ha prolongado y afectado el precio de alimentos como el trigo y el valor del gas y los combustibles, además de la extensión de los problemas en las cadenas de suministro y alzas en los costos de transporte internacional que provocó la pandemia y los efectos de la debilidad en el sector inmobiliario chino y su política cero Covid.
La mayor incertidumbre política interna llevó a un alza el tipo de cambio, que el 12 de julio sobrepasó por primera vez los $ 1.000, y lograra su récord histórico el 14 de julio al terminar en $ 1.051. Lo que impactaría principalmente el precio de los bienes importados.
Por sectores
Alimentos y bebidas no alcohólicas es la división de la canasta que más subió en los últimos doce meses al mostrar un aumento de 24,7%. Transporte ocupa el segundo lugar en el alza en el costo de la vida al completar un 18,3%. En tercer lugar, aparece Restaurantes y hoteles con 16,5% y, en cuarto, Bienes y servicios diversos con 13,8%.
Comunicaciones es la única división del IPC que mostró una caída anualizada en sus precios al terminar con -5,6%.
