Un proyecto que divide y no entusiasma
Discutir un proyecto en el Senado hasta la madrugada y terminar con un texto que...
Discutir un proyecto en el Senado hasta la madrugada y terminar con un texto que algunos parlamentarios tildan de “vulneración deliberada de las normas constitucionales”, resultan a todas luces antecedentes poco auspiciosos para una iniciativa del Ejecutivo.
Lógicamente, cualquiera podría suponer que se trata de un proyecto de marcada connotación política e ideológica, pero no: es la discusión del proyecto de extensión del beneficio de postnatal para las mujeres que trabajan, un asunto que -al menos a primera vista- está lejos de ser motivo suficiente para tanta beligerancia.
Más aún, este clima de división contrasta con la imagen de consenso y transversalidad política que proyectó la comisión asesora que, para estos efectos, designó el presidente de la República. Expertos de distintos sectores debatieron para llegar a una propuesta que desligara el costo de la maternidad de la contratación de mujeres, garantizara el cuidado de los hijos e incentivara una mayor corresponsabilidad en su cuidado y crianza. De sus estudios, concluyeron que lo mejor para el país es mantener inalterado el permiso de postnatal, con el tope del subsidio existente, y crear un permiso postnatal parental.
Pero los planes del Ejecutivo siguieron un derrotero distinto, concluyendo en un proyecto que no entusiasma a los expertos y, por el contrario, divide y tensiona las relaciones entre gobierno y oposición.
Quizás sea el momento para retroceder y generar, nuevamente, los consensos necesarios en un proyecto que debiera ser más técnico que político, antes que prolongar la polémica partidista.