El rumbo de la política monetaria en Chile
La minuta de la reunión de política monetaria de abril reveló que el consejo del Banco Central evaluó en ese momento la opción de subir la tasa de interés en 25 puntos base...
La minuta de la reunión de política monetaria de abril reveló que el consejo del Banco Central evaluó en ese momento la opción de subir la tasa de interés en 25 puntos base. Pero, como es de público conocimiento, la autoridad finalmente se inclinó por una nueva mantención de la misma en 5%.
Detrás de la decisión estuvieron, entre otros elementos, las expectativas imperantes en el mercado local, más alineadas con la idea de una eventual alza en el segundo semestre; y, como viene sucediendo hace un par de meses, el complejo escenario económico internacional, con el condimento de que a los problemas de Europa se sumaron ciertas señales de moderación de la actividad en China y de debilidad en las cifras de empleo de Estados Unidos.
Esto último fue corroborado el viernes, cuando se conoció que el desempleo de la mayor economía del mundo bajó, pero no por las mejores razones. En efecto, la tasa cedió de 8,2% a 8,1% en un contexto donde tanto la fuerza de trabajo como la creación de empleos se expandieron a un menor ritmo. La decepción ante la noticia se sintió especialmente en el mercado bursátil, donde los indicadores cedieron más de 1%. Atrás pareció quedar el optimismo sobre la recuperación estadounidense, sumando otra dosis de incertidumbre a la economía mundial.
A la luz de estos elementos, y en el entendido que la actividad en Chile se desacelera -sin presionar adicionalmente la inflación-, parece ganar terreno la probabilidad de que el Banco Central termine el año sin haber concretado el alza de tasas que pareció tan obvia hace sólo unas semanas. El camino de las decisiones, como siempre, no se ve fácil.