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Alto contrasteCon una notoria baja en las cifras de desempleo, desde hace un tiempo el gobierno de Sebastián Piñera ha sacado cuentas alegres respecto a lo que ha sucedido en esta materia desde que comenzó su administración. Pasar de una tasa de desocupación de un 8,8% en 2010 a una de 6,4% -última cifra informada por el INE- no es menor.
El mayor dinamismo que comenzó a observarse en la economía desde el año pasado es la razón principal de este panorama, que ha hecho que en algunos sectores de la actividad haya escasez de mano de obra, con la consiguiente alza de los salarios que ello conlleva.
Este es el escenario general en que se desarrollará el próximo martes la conmemoración del Día del Trabajo, que durante el año pasado sirvió para que el presidente anunciara que vendría un cambio “muy revolucionario” para asegurar la salud, seguridad y la calidad del trabajo de todos los chilenos.
Pero la percepción es que la agenda laboral no ha avanzado como se esperaba. Y es que pese al acuerdo entre la CPC y la CUT sobre ochos puntos, ambas partes no han conseguido que ello se concrete en un proyecto de ley.
Desde el empresariado se ha señalado que el gobierno debiera tomar los ocho puntos en su conjunto y no priorizarlos, mientras que desde la CUT se ha dicho que el acuerdo no tiene sentido si es que La Moneda no toma la iniciativa parlamentaria.
A la luz de todo esto, es natural que concite alto interés lo que el gobierno pueda anunciar la próxima semana, en un ambiente en que los temas de multirut, de seguridad laboral y de capacitación no han avanzado todo lo rápido que se esperaba.
