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Las causas del desempleo juvenil

Gustavo Díaz

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La baja del crecimiento y las variables del desempleo están afectando fuertemente al sector juvenil que busca introducirse en el campo laboral.

La tasa de desempleo de los jóvenes de 15 a 24 años en Chile se eleva a 17,4%, esto es 3,7 veces superior a la tasa de los adultos de 25 años y más, de acuerdo a cifras del Instituto Nacional de Estadísticas. Varias son las causas que se han señalado para explicar esta fuerte diferencia, pero aun así la sociedad ha sido incapaz de resolver este fenómeno.

El crecimiento constituye una condición necesaria, aunque no suficiente, para generar empleo. Un bajo ritmo de crecimiento se asocia a un mayor desempleo; y por el contrario, una economía en expansión abre nuevas oportunidades laborales, pero la existencia de asimetrías de las elasticidades de empleo entre los jóvenes y adultos revela que la creación de puestos de trabajos no es homogénea, lo que sugiere que existen causas adicionales. La primera se refiere a las expectativas de los jóvenes en relación al empleo buscado. Existen aspiraciones, tanto de remuneraciones como de contenidos, que no conversan con la realidad, y en consecuencia no es sorprendente que se produzcan desajustes entre las expectativas y el contexto laboral.

Mientras no hay mucha incidencia entre jóvenes de hogares más acomodados, sí ocurre entre los más vulnerables, al convertir en fuente de frustración sus escasas probabilidades de inserción laboral.

La segunda causa es el escaso capital humano que se posee en las edades más tempranas, en términos de años de escolaridad y experiencia laboral. Se traduce en empleos peor remunerados y de escasas perspectivas de aprendizaje. Y es que las ocupaciones con mayores contenidos de educación son las que crecen más rápido y donde los retornos por educación y experiencia son crecientes. En este escenario, los jóvenes desertores del sistema educacional son penalizados con mayores tasas de desempleo y menores remuneraciones cuando encuentran trabajo, lo que contribuye a agravar el círculo antes señalado.

Hay una tercera causa del desempleo juvenil y es referida al funcionamiento del mercado del trabajo, con una regulación laboral inadecuada, rígida y costosa. Esto afecta en forma discriminada a los jóvenes porque requieren de aprendizaje, de períodos de prueba y adquisición de experiencia. Por tanto, mientras no se aborde el problema del alto desempleo juvenil en forma integral, no se lograrán avances concretos y permanentes en esta materia.

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