DF Tax | Factores ASG impactados por los impuestos

Alicia Domínguez

Hoy ya no cabe duda de que la gestión de los factores Ambientales, Sociales y de Gobernanza (ASG) es un elemento esencial y condicionante de la capacidad de generación de valor a largo plazo de toda organización.

Las empresas están incorporando en forma creciente, y hasta se podría decir con cierta urgencia, estos nuevos conceptos desde lo más profundo en la gestión de sus negocios. Sólo serán sostenibles las organizaciones que creen y desarrollen inversiones sostenibles social y ambientalmente responsables.

Compartiremos una serie de artículos de ASG e impuestos y con éste partiremos por las generalidades. Así, para estar en línea conceptual, recordemos qué representa cada elemento ASG para luego ver ejemplos de cómo se conectan con la tributación.

Los factores ambientales (A) ponderan la forma en que una organización se relaciona con la naturaleza; cómo se comporta respecto del cambio climático, los recursos naturales, la gestión de los residuos, entre otros factores.

Los factores sociales (S) se refieren a la relación de la organización con sus diferentes grupos de interés. Este elemento social pondera el comportamiento de las organizaciones frente a los derechos laborales y previsionales de los trabajadores, las condiciones de salud y seguridad en el trabajo, la igualdad de oportunidades, la diversidad e inclusión, la integración del negocio con las comunidades impactadas por él , los derechos de los pueblos originarios y, más ampliamente, los derechos humanos en general.

Los factores de gobernanza (G) se refieren esencialmente al gobierno corporativo de la empresa, por ejemplo, a la composición y diversidad de su directorio, las políticas de transparencia en su información pública y sus códigos de conducta.

Las políticas de impuestos inciden en forma importante en una exitosa gestión de los elementos ASG. A todos los gobiernos les interesa que las empresas los conviertan en su propósito, para ello tienen el poder de crear herramientas, entre ellas las fiscales o tributarias, que castiguen conductas que amenazan los elementos ASG o estimulan comportamientos deseados.

El factor ambiental, por ejemplo, se impacta con los impuestos verdes, que -más que recaudar- buscan castigar la emisión de gases de efecto invernadero. Pero la regulación de estos tributos también tiene su lado de "zanahoria". Ejemplo de esto último es la posibilidad de desarrollar proyectos que neutralicen las emisiones de carbono y que servirán (en Chile desde 2023) como crédito contra el gravamen a las emisiones de fuentes fijas.

En el factor social también se ve impactado por los tributos, por ejemplo, que los gastos por responsabilidad social rebajen la base imponible de los impuestos corporativos es esencial. Algo que ahora nos parece obvio tuvo, sin embargo, la consagración legal recién en 2020.

En lo social también está presente el garrote; así, por ejemplo, desde 2020 la empresa que, pudiendo donar, destruye bienes sujetos a la ley REP, es castigada con un gravamen de tasa 40% aplicado sobre el costo tributario de lo no donado.

En materia de gobernanza, la tendencia tributaria va hacia la transparencia y publicidad respecto de la estrategia de impuestos del grupo empresarial, el tipo, lugar y magnitud de los gravámenes pagados. Muy pronto esto será materia de información obligatoria y bajo estándares globales.

Seguiremos comentando estas materias en un próximo artículo...