Chile se encamina a su primera recesión técnica desde la crisis financiera de 2009
- T+
- T-
Chile, otrora modelo de la ortodoxia económica en el mundo emergente, parece destinado a entrar en su primera recesión desde la crisis financiera mundial.
La noticia llega justo cuando muchas de las economías más débiles del mundo en vías de desarrollo parecen estar comenzando a repuntar, con Argentina regresando al crecimiento en el tercer trimestre de 2016, Rusia inclinándose a salir de su recesión de dos años este trimestre, y Brasil y Nigeria posiblemente dando la vuelta a la esquina a fines de este año.
Sin embargo, Chile reportó la semana pasada que su economía se contrajo 0,4% en los últimos tres meses de 2016, “debilitándose alarmantemente” en palabras de Andrés Abadia, economista senior en Pantheon Macroeconomics, una firma de investigación de Estados Unidos, desde un crecimiento de 0,9% en el tercer trimestre, incluso cuando el desempeño año sobre año se mantuvo modestamente positivo, como muestra el gráfico.
Muchos observadores esperan que el Producto Interno Bruto (PIB) de Chile se contraiga nuevamente este trimestre, condenando al país y sus 18 millones de habitantes a su primera recesión técnica desde 2009.
“Chile está enfrentando mayores riesgos de recesión a pesar del repunte de los precios del cobre”, dijo Win Thin, jefe global de estrategia de divisas de mercados emergentes en Brown Brothers Harriman, refiriéndose a la mayor exportación del país, que ha aumentado 23% en términos de dólar y 14% en pesos chilenos desde inicios de 2016.
Desafortunadamente, el cobre es actualmente parte de los problemas de Chile. Los trabajadores de Escondida, la mayor mina de cobre del mundo, que representa 20% de la producción chilena del metal y 2% de su PIB, entraron en huelga el 9 de febrero.
“Solo por el tamaño de la mina, la paralización tendrá gran impacto en la producción de cobre en el primer trimestre”, dijo Adam Collins, economista para América Latina de Capital Economics. “Esto impactará fuertemente el crecimiento en el primer trimestre y sospechamos que causará otra contracción trimestral del PIB”, apuntó.
Collins considera que la probable disminución del PIB en el trimestre actual obedecerá “casi enteramente a la huelga”. Sin embargo, los 2.500 huelguistas no fueron la única razón para la debilidad económica de Chile y claramente no tuvieron ninguna responsabilidad en la contracción registrada en el cuatro trimestre del año pasado.
Los dos culpables fueron las exportaciones de bienes y servicios, que cayeron 2% trimestral, y el gasto de capital, que retrocedió 5,6% trimestral, extendiendo una caída de 0,5% en los tres meses anteriores.
“La formación bruta de capital fijo en la construcción, y en maquinaria y equipos sigue siendo débil. La economía chilena se mantendrá débil si el sector de la inversión no es capaz de revertir su desempeño durante los próximos trimestres”, dijo Eugenio Alemán, economista senior en Wells Fargo Securities.
Collins ofreció un destello de esperanza respecto del gasto de capital, argumentando que “el descenso de la inversión minera ha alcanzado más o menos el fondo”, mientras que un declive anual en la construcción residencial en el cuatro trimestre fue en gran medida impulsado por cambios tributarios que trajeron consigo una ola de construcciones a fines de 2015.
Pero si bien una caída de 1,6% en las importaciones de bienes y servicios de Chile el año pasado fue positiva para el crecimiento del PIB, también remarcó la debilidad de la demanda interna en toda la economía.
En ello puede haber algún alivio. Un descenso en la inflación a 2,7%, por debajo de la meta de 3% del banco central, permitió a la entidad recortar las tasas de interés en enero y nuevamente este mes, a 3%, respaldando el crecimiento doméstico.
El mercado está valorando un nuevo recorte de un cuarto de punto este año, pero algunos piensan que el banco podría ir más allá, con Thin sugiriendo que “si la tendencia actual continúa”, la tasa podría caer tan bajo como a 2% a fines de este año.
Algunos analistas esperan que con el fin de la huelga de Escondida, Chile pueda regresar al crecimiento en el segundo trimestre de 2017.
Pantheon Macroeconomics ha recortado sus pronósticos para todo 2017 a la luz de los decepcionantes datos del cuarto trimestre, pero todavía espera un crecimiento en el año calendario de 1,7%.
“El efecto rezagado de los recortes de tasas, una inflación relativamente estable, una mejora de la economía mundial, potenciales estímulos fiscales en EEUU, el aumento global de los precios de los commodities, y el ciclo de elecciones presidenciales (con comicios generales y presidenciales en noviembre), todos apuntan a un crecimiento más fuerte”, dijo Abadia.
Sin embargo, otros creen que cualquier recuperación probablemente será más modesta: el pronóstico de Capital Economics, de un crecimiento anual de 1%, sería el más débil desde 2009 y significa que no habrá crecimiento per cápita en un país que ya está lidiando con el creciente descontento político.
“La inversión es permanentemente más débil. La economía no volverá al crecimiento de 5% o 6% que vimos en los años 2000”, aseguró Collins.