Competidor español en licitación de velocidades de internet asegura que “en Latinoamérica y Europa están interesados en el modelo chileno”

El 26 de octubre el Comité Representativo, instancia que reúne a Entel, Claro, Grupo GTD, Mundo, Movistar, VTR y WOM, abrirá el sobre económico que decidirá el vencedor en la carrera por convertirse en el operador a cargo del Organismo Técnico Independiente (OTI). Esta entidad será la responsable de elaborar una herramienta para medir las velocidades de internet y así zanjar las disputas en los contratos entre las empresas y los consumidores.

Uno de los participantes es MedUX, compañía española que formó un consorcio con la firma de bandera chilena Microsystem, su aliado para enfrentarse a Sonda-Ookla y la brasileña Cleartech, los otros dos rivales que también están detrás del contrato.

Esta es la segunda vez que se lleva a cabo el concurso. En noviembre pasado se declaró desierto porque ninguno de los dos participantes -Sonda y MedUX- cumplían con las reglas de la subasta en sus aspectos económicos y técnicos. Los licitantes rearmaron el proceso a los pocos meses y despejaron las dudas para esta nueva instancia.

A juicio del CEO de la firma con base en España, Luis Molina, “fue necesario, porque hoy hay una estructura que combina mucho mejor los intereses del Estado, las empresas y los competidores. Chile es pionero en una licitación tan compleja. Esta segunda fase es mucho más clara que la anterior en los requisitos técnicos y pues desde nuestro punto de vista ahora la propuesta puede ser más sencilla”.

-¿Cuáles fueron los aspectos que se arreglan en la licitación?

-Se definieron mucho mejor las condiciones técnicas que se entregan en el proceso, las pruebas individuales de cara al usuario y se despejó las dudas sobre cuándo la infraestructura debe estar instalada en Chile y cuándo en el extranjero. Eso nos permitió presentar una oferta más precisa y adecuada al mercado nacional. Además, nos ayudó a dimensionar mejor cómo armar tanto la propuesta económica como la técnica y estamos cómodos con la ejecución del proyecto.

Tenemos intención de crecer mucho en Latinoamérica y esta licitación nos permitirá entrar con fuerza al mercado chileno.

-¿Tienen operaciones en Latinoamérica?

-Estamos prácticamente en toda la región, con sucursales en México, Colombia, Costa Rica, El Salvador. Independientemente del resultado estamos decididos a abrir oficinas en Chile, donde ya conseguimos un operador como cliente y por supuesto, nuestra apuesta es clara: queremos reforzar nuestra presencia el Latinoamérica porque hoy es muy necesario tener claro cómo es la experiencia del usuario de internet.

Nuestro giro de negocio es mejorar la calidad de internet. Parece muy sencillo, pero nuestra intención es elevar el estándar de los servicios fijos, móviles y OTT. Identificamos los problemas de las redes y sus posibles mejoras para que realmente funcione mejor. Estamos presentes en 25 países.

-Los operadores han manifestado que es muy complejo hacer mediciones de internet. ¿Qué tan precisa es esa afirmación?

-Es cierto, realmente hay una complejidad importante. Es fundamental conocer el contexto del usuario para ver las condiciones cuando se hacen las pruebas. Pienso que Chile es pionero en este tipo de licitaciones, hay otros mercados que están desarrollando estrategias similares como Alemania, y creo que Chile se está adelantando y será un referente en la región para que los reguladores transiten a sistemas como este.

Definir un modelo donde un ente independiente vele por los intereses de los stakeholders del mercado, como usuarios, operadores y el regulador, es un sistema único que te garantizará la autonomía a la hora de medir la calidad de internet.

-¿Hay mercados que estén interesados en estos momentos de armar un sistema así?

-Si, varios reguladores en Latinoamérica y Europa están interesados en el modelo chileno. Prefiero no mencionar los países, pero nos están preguntando mucho por el sistema que se está armando, este concurso ha generado un interés enorme y sobre todo desde la óptica de los reguladores. Realmente pienso que Chile debe estar orgulloso de lo que está gestando, independientemente que es un reto grande. Justamente este desafío hace que sea pionero e innovador.

-Si logran adjudicarse el proyecto, ¿cómo será el despliegue?

-Contamos con un socio local que tiene mucha experiencia en Chile. Básicamente desplegamos un ecosistema de aplicaciones en smartphones de Android, IOS, PC, Mac y Linus, además de dispositivos dedicados a la medición para poder asegurar que el proyecto funciona correctamente. Estamos convencidos que podemos cumplir con las expectativas de los operadores.

Tenemos a nuestro equipo en Chile a la espera de la apertura del sobre, instalándose para abrir oficinas. Si nos adjudicamos el proyecto, podemos desplegar el sistema de medición mucho antes de lo que exige el concurso.