El denominado pacto fiscal, que contempla una serie de iniciativas y proyectos de ley para retomar la vía legislativa de la reforma tributaria, agregó un insumo clave a fines de la semana pasada, cuando el Ministerio de Hacienda recibió el informe de la comisión de economistas presidida por el exministro Manuel Marfán.
El grupo, también integrado por Rodrigo Vergara, José De Gregorio, Andrea Repetto, Andrea Tokman, José Pablo Arellano e Ignacio Briones, generó dos conclusiones principales: que cada punto de crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) le agrega US$ 570 millones en ingresos tributarios netos al Fisco (esto es, pago de impuestos menos gasto público, como pagos de remuneraciones), mientras que los aumentos sucesivos de impuestos corporativos desde el año 2000 le han restado al PIB del país ocho puntos hasta este año.
Ahora, con el reporte en manos de los distintos actores políticos, será el turno del Congreso de debatir hacia dónde migrará el pacto fiscal, con el foco en incentivos al crecimiento y la inversión y también algunas alzas impositivas en el horizonte, como se espera que proponga el ministro Mario Marcel.
Todo esto ad portas de que el jueves se realice una nueva reunión entre el Ejecutivo y los representantes de partidos políticos, donde también se entregará un informe de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) que calculará el espacio que tiene el Fisco para reasignar recursos presupuestarios. Con este número en mano más el informe de la comisión Marfán, Hacienda definirá las necesidades de financiamiento del proyecto con cambios al impuesto a la renta, que se ingresará en marzo al Congreso y que, preliminarmente, busca recolectar un 1,5% del PIB.
La visión desde el oficialismo: hay espacio para aumentar tributos
El senador PC e integrante de la comisión de Hacienda, Daniel Núñez, pone la lupa sobre el aporte del crecimiento al erario público, enfatizando el informe muestra que la contribución "no alcanza por sí solo para enfrentar las prioridades que tenemos". De hecho, recalca que el documento habla de medio punto del PIB de efecto hacia finales de la actual década.
Por lo mismo, Núñez defiende la necesidad de aumentar la tributación hacia los más altos ingresos: "Recordemos que para enfocarnos en cuatro prioridades (pensiones, salud, seguridad y sistema de cuidados) requerimos 2,7% del PIB. Se ratifica la necesidad de una reforma tributaria donde sean quienes tienen más los que contribuyan a financiar urgencias sociales", plantea.
La senadora PPD y presidenta de la comisión de Economía, Loreto Carvajal, califica de "urgente" la necesidad de que Chile supere la situación de "estancamiento" que vive a nivel económico y social, para lo cual recalca la necesidad de un acuerdo "transversal" para volver a crecer y aumentar la recaudación fiscal, con foco en solventar un aumento en la Pensión Garantizada Universal (PGU) y la reducción de las listas de espera en salud.
"Es de esperar que el caso Hermosilla y la industria de facturas falsas detectadas motive a la clase político a reforzar los programas antievasión y antielusión tributaria, como la eliminación de exenciones tributarias que aún reciben las rentas del capital. El informe de la comisión Marfán revela que el espacio fiscal será más estrecho para construir ese acuerdo transversal, pero lo más relevante es que insistamos en construir ese acuerdo", señala.
El diputado RD de la comisión de Hacienda, Jaime Sáez, cree que el documento del grupo de economistas "ratifica" lo que han dicho organismos internacionales, como el Fondo Monetario (FMI), que instó al Gobierno a realizar una reforma tributaria, así como entidades locales como el Consejo Fiscal Autónomo (CFA), que puso sobre la mesa la necesidad de encontrar fuentes de financiamiento permanentes para los nuevos gastos públicos.
"Con el puro crecimiento económico no alcanza. Un alza justificada en algunos impuestos, como considera la reforma tributaria original y se ha venido conversando, es plausible. Pero también hay que tomarse en serio hacer competitiva nuevamente a la economía chilena", recalca.
Una postura que también comparte su par PS de la misma comisión, Jaime Naranjo, quien advierte que si no se alcanza un acuerdo con la oposición de aquí a marzo próximo, "eso sería todo".
"Algunos insisten solo en el crecimiento y a lo largo de la historia ha quedado demostrado que no es suficiente. Por eso esto debe ser un combinación de tributos e incentivos de inversión y a la productividad, pero no veo fácil solo proponer tributos, ya que la oposición está muy cerrada. Lo único claro que debemos tener es que el pacto fiscal es ahora o a este Gobierno se le pasó la oportunidad para recaudar más y pagar la deuda social", sentencia.
La senadora de la DC, Yasna Provoste, argumenta que el informe Marfán ratifica la importancia de construir una "hoja de ruta común", con foco en acuerdos para retomar el camino del desarrollo, como mejorar la calidad de la educación y también impulsar una agenda para la diversificación productiva "que le dé nuevos motores a nuestro crecimiento".
"En la búsqueda de mayor recaudación fiscal, insistimos en avanzar en un plan antievasión y antielusión tributaria y terminar con las exenciones a las rentas del capital que ya no se justifican, como se conversó en la comisión Briones", propone.
La presidenta de la comisión de Hacienda de la Cámara, Gael Yeomans (CS), aterriza el informe y plantea que la proyección de ingresos fiscales, según el aumento de un punto porcentual del PIB, "es menor al que se había estimado inicialmente". Además, que el crecimiento por sí solo "no va lograr recaudar los recursos para financiar las demandas que hoy tiene la ciudadanía".
"Debemos tener la certeza de que las políticas que el Estado comprometa con los ciudadanos estén financiadas de manera permanente, con recursos y una recaudación que sea permanente. Por esa misma razón es que tambien necesitamos un sistema tributario justo, equitativo, eficiente y que aumente la masa tributaria", plantea.
Oposición seguirá oponiéndose a mayores tasas
El senador RN de la comisión de Hacienda, José García Ruminot, resume en palabras simples la postura de una parte importante del conglomerado opositor tras conocer el informe Marfán: "Espacio para subir impuestos no hay ninguno. Condiciones para mejorar nuestras normas antielusion y evasión sí. El propio Ejecutivo ha estimado una mayor recaudación, por aplicación de estas disposiciones, en un 1,5 % del PIB. Manuel Marfán lo ha dicho muy claro: el acento hay que ponerlo en el crecimiento de la economía, no en alza de impuestos".
Su par del mismo partido pero de la comisión del ramo de la Cámara, Sofía Cid, argumenta que un alza de impuestos "no debería ser tema a estas alturas" de la discusión, planteando más bien que ve espacio para llegar a acuerdos en temas como medidas antielusión y elusión y de mayor eficiencia en el gasto público.
"Chile tiene que volver a preocuparse y ocuparse del crecimiento, y ello parte por reconocer y admitir que un factor importante en la desaceleración de éste ha sido ha sido el aumento de los impuestos corporativos, que han costado aproximadamente ocho puntos del PIB en diez años", dice.
Uno de los representantes de la UDI en la comisión de Hacienda de la Cámara, Guillermo Ramírez, no ve "ningún espacio" para aumentos de tributos, incluso aunque fueran "tímidos" ajustes a algunos gravámenes: "El informe muestra que lo que tenemos que hacer es crecer. Creciendo, las familias progresan, los salarios aumentan y el Estado recauda más. Subir impuestos, aunque sea tímidamente, lesiona nuestra capacidad de crecer”.
El diputado de Avancemos Chile Víctor Pino, cree que en lugar de "tomar un pedazo más grande de la torta" con nuevos impuestos, hay que centrarse en "hacerla crecer juntos".
"Llevamos una década de estancamiento, así que evitemos aumentar el gasto estructural. Vamos por el crecimiento, sin cargar más impuestos, en donde el control del gasto fiscal, el control de la elusión y la evasión deben ser parte fundamental de la solución", agrega.
Mientras que la diputada independiente del PDG, Karen Medina, se centra en los escándalos que han remecido al sector público este año, como el caso convenios y los audios filtrados donde se mencionan eventuales sobornos a funcionarios del SII y la CMF: "¿Qué pasa cuando se mete la mano al bolsillo de todos los chilenos? ¿Cuáles son las penas? Hay que avanzar primero en ordenar la casa y luego, junto con lo que se recaude por evasión y elusión, ver si vamos a subir los impuestos a todos los chilenos, a la clase media, a la gente más pobre del país”.
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