Con un saldo favorable por US$ 1.031 millones comenzó 2019 para el comercio exterior chileno, según informó ayer el Banco Central.
El registro se logró tras el leve repunte que anotaron las exportaciones en el primer mes del año, cuando crecieron 0,6% en doce meses hasta los US$ 6.671 millones.
La cifra marcó un quiebre en la trayectoria vista en los dos meses anteriores, cuando los envíos al exterior cayeron 3,5% y 5,5%, respectivamente.
Pese al tímido avance interanual, el monto alcanzado marcó su mayor nivel en trece meses, tras los US$ 6.915 millones logrados en diciembre de 2017.
En el detalle, las ventas al exterior exhibieron comportamientos mixtos dependiendo del área. Así, la minería retrocedió 3,3%, afectada por la baja de 0,3% del cobre, donde los cátodos del metal rojo retrocedieron 16,4%, mientras los envíos de concentrado subieron 19,5%.
El sector silvoagropecuario sacó la cara por los exportadores al crecer 7,3% hasta los US$ 1.263 millones, anotando el segundo mes consecutivo de avances pero marcando un menor ritmo al visto en diciembre, de 14,8%.
En ello, el sector frutícola representó el 96,4% del sector, destacando el incremento de 14,3% de las cerezas, tras alcanzar envíos por US$ 773 millones.
El sector industrial continuó exhibiendo cifras azules pero nuevamente marcó una desaceleración, tras sólo avanzar 2% hasta US$ 2.600 millones, marcando su tercer mes seguido de menor ritmo.
Buenos vientos para la inversión
En enero, las importaciones marcaron una leve desaceleración anual al mejorar 3% hasta los US$ 5.639 millones, un porcentaje que contrastó con el 5,7% visto en diciembre pasado.
Con todo, las internaciones sumaron 26 meses continuos de incrementos, aunque el desempeño de enero de 2019 fue el segundo más bajo después del 1,8% en noviembre pasado.
Por su parte, el detalle también arrojó señales mixtas para la economía. Esto, porque las importaciones de bienes de consumo cayeron 0,1% hasta US$ 1.809 millones, pero mostraron una aceleración respecto de los malos registros de los dos meses previos, cuando las compras de este tipo retrocedieron 5,9% y 0,9%, respectivamente.
El lado más positivo lo acapararon las importaciones de bienes de capital, que en el primer mes del año saltaron 17,7% hasta los US$ 1.306 millones, marcando el alza más alta de los últimos ocho meses.
Según comentó BCI Estudios en un reporte enviado a clientes, la cifra entregaría “una visión de recuperación en la inversión hacia los próximos trimestres”.
En el caso de las adquisiciones de bienes intermedios, se observó un retroceso de 1,8% hasta los US$ 2.830 millones, afectadas por la caída en las compras de petróleo y diésel, que en el primer mes del año cayeron 6,8% y 16,2%, respectivamente.