Renuncia de Bulnes: Para mayor cohesión, equilibrar el poder

Cristián Saieh

La renuncia del agente Bulnes a la defensa de Chile es decidora de que los desequilibrios de poder entre Chile y Bolivia. Las palabras del ex agente fueron claras. "Le comenté en su momento a la presidenta y al canciller que me parecía que tenía que trabajar con un efecto que se había producido, se había perdido la cohesión al respaldo del equipo jurídico", dijo, utilizando el argumento que "faltó más unidad" en la posición chilena. Para rematar, señaló que "es vital que el agente del país disponga del respaldo macizo y sólido de la sociedad en general y eso se perdió un poco, estamos a tiempo de reencantar". ¿Y cómo hacerlo?
Necesitamos que la posición de Chile sea sólida no solo ante el tribunal sino ante todos los actores relevantes. Se requiere reconocer que se ha descuidado generar poder o al menos nivelar el de Bolivia. En efecto, el vecino país ha preparado exhaustivamente todas las aristas del caso de manera rigurosa y consistente. No hay una sola acción que muestre falta de coherencia. Una segunda fuente de poder es hacerse de aliados a su causa; vemos cómo diversos países, incluidos líderes como el Papa Francisco, directa o indirectamente han apoyado al país altiplánico. Y tercero, ha utilizado a la perfección su Plan B. Durante un largo período Bolivia intentó llegar a un acuerdo negociado, lo que no ocurrió. Entonces, recurrió a La Haya para que ésta falle la disputa.

Lo curioso es que la petición boliviana es negociar una salida soberana al mar y, por lo que entendemos, la defensa de Chile indica que esa negociación no puede tener un resultado determinado ni el efecto de obligar a Chile a cederla. Es por esto que, en el caso de un fallo favorable a nuestro vecino, no podríamos hablar del inicio de un proceso de negociación si Chile no se encuentra obligado a llegar a un resultado que implique entregar mar. Es una paradoja ya que estaremos "obligados a no estar obligados". El problema será que en ese escenario, Bolivia volverá a utilizar las fuentes de poder a su alcance para intentar lograr su objetivo, pero esta vez con un eventual criterio de legitimidad potente: la sentencia.

Se hace urgente que Chile utilice herramientas que logren equilibrar la balanza antes de que sea tarde. Tal vez la renuncia del agente Bulnes sacuda a los responsables chilenos de defender nuestra soberanía. Una preparación exhaustiva, una campaña comunicacional sólida y una defensa impecable de nuestra posición jurídica son las claves del éxito. Y, en este punto, más que pensar en las bondades de nuestro caso se hace indispensable pensar en las de la otra parte. Ya lo decía Abraham Lincoln: "Cuando me preparo para razonar con un hombre gasto un tercio del tiempo pensando en mí y en lo que voy a decir y dos tercios pensando en él y en lo que va a decir".

Es momento de planificar pensando con la mente del otro, para anticipar sus jugadas. Eso generará una posición robusta que traerá como resultado cohesión y real convencimiento de todos los actores de que Chile tiene la razón.