Ventas diarias del comercio minorista caen por séptimo mes consecutivo en enero, pero moderan magnitud

El ajuste de la economía sigue su curso, y de eso da cuenta el Índice de Ventas Diarias del Comercio Minorista (IVDCM), que en enero anotó su séptima caída consecutiva, pero de una magnitud más moderada que en períodos anteriores. 

En el primer mes de este año, la baja fue de 4,92%, más acotada que la contracción de 7,28% anual registrada en diciembre. 

Así se lee en los datos publicados este lunes por el Banco Central, como parte de su esfuerzo por elaborar estadísticas experimentales. Para construir el índice, el ente rector usa registros administrativos de boletas electrónicas proporcionados por el Servicio de Impuestos Internos (SII), y considera el total de las transacciones, independiente del medio de pago y canal de venta, entre empresas y consumidores finales. 

Además, el Central detalla que, de cara a obtener “series de tiempo consistentes”, el indicador se constituye a partir de una muestra de empresas seleccionadas por su estabilidad de reporte.

La variación negativa del primer mes de 2023 es, también, más acotada que la merma de 8,41% registrada en noviembre, con lo que el último dato se convierte en la segunda moderación consecutiva del índice. Eso sí, es algo superior a la caída de 3,95% alcanzada en octubre del año pasado. 

Así, en los meses más recientes el indicador parece estar dejando atrás tanto sus caídas más profundas, como sus recuperaciones más pronunciadas, ambas consecuencia de los desequilibrios que implicó la pandemia en la economía. 

De hecho, la serie histórica -que data de 2018- muestra que en abril de 2020 se registró un desplome de 27,55%, y que poco más de un año después, en mayo de 2021, el repunte trepó hasta 79,07%. 

Baja mensual

Donde parece haber más irregularidades que en el desempeño anual es en el mensual, ya que en enero las ventas diarias del comercio minorista cayeron un 23,64% frente a diciembre. Esto, luego de crecer un 27,1% en el último mes del año pasado, uno marcado por el mayor consumo que generan las fiestas de fin de año como Navidad, pero que aún así implicó escapar del terreno negativo que se había registrado en noviembre. 

Así, las variaciones mes contra mes del año pasado estuvieron marcadas por altas y bajas: en enero, febrero, abril, junio, septiembre y noviembre el indicador dio cuenta de caídas, en contraste con las alzas de los restantes seis meses del año.