Marzo será un mes clave para la Central Unitaria de Trabajadores (CUT). Las irregularidades detectadas en la elección de agosto del año pasado, que dejaron como resultado una directiva transitoria con la promesa de convocar un proceso que diera garantías de transparencia y legitimidad, renacen como telón de fondo de cara a la nueva convocatoria de elección de la multisindical. Esta vez frente a la votación de cambio de estatutos de la Central que fue aprobada en el XI Congreso del 27 y 28 de enero, que lejos de calmar las aguas internas y pavimentar el camino para buscar salidas frente a la crisis, las agitó aún más con nuevas acusaciones.
La solución que sonaba con más fuerza para salir de la crisis era para muchos la implementación del voto universal. Sin embargo, pese a la convicción manifestada por diversas organizaciones, en el Congreso ganó la opción de alcanzar este fin recién en 2020.
Según comentan asistentes al encuentro, precisamente el primer día de Congreso se debatió acerca de cuáles serían las propuestas de reforma que serían incorporadas en la votación, generándose controversia en cuanto a si el voto universal debía ser establecido en las elecciones de este año o las del 2020.
Acto seguido, relatan, la materia se sometió a decisión por medio de votación a mano alzada y sin considerar la ponderación del voto (un delegado, un voto), vulnerando artículos del Estatuto y del Reglamento del Congreso que solo permiten “votación económica en asuntos de amplio consenso”.
Esta situación fue descrita en una petición del 10 de febrero firmada por diferentes dirigentes -entre ellos el independiente de la lista “A recuperar la CUT para los trabajadores” Andrés Giordano- a la Dirección del Trabajo (DT), donde se solicita formular observaciones al estatuto reformado de la Central. En el escrito se detalla que la definición de las materias a reformar fue adoptada con infracción de normas estatutarias y que la votación de aprobación de la reforma de estatutos se realizó sin que se confeccionara ni exhibiera a los votantes una minuta con los puntos efectivamente sometidos a votación antes de su inicio.
También se explicita que si bien el día 27 de enero hubo unanimidad entre los delegados para incorporar como propuesta de reforma al estatuto el cambio en el sistema de elecciones, cuando se dieron a conocer públicamente estos documentos el 3 de febrero, se pudo constatar que el documento que había sido presentado a la DT con posterioridad a la votación no contenía todos los acuerdos, como el que las elecciones en 2020 serían con voto directo y universal. Y concluyen: “La reforma de estatutos fue aprobada por apenas 82.236,94 votos ponderados de un total de 145.483,99 votos habilitados, es decir por el 56,5%. Esto significa que la reforma fue aprobada por un quórum inferior al exigido por los estatutos, los que requerían un 60% del total de votos ponderados”.
Directiva bajo presión
En medio de los cuestionamientos, la actual presidenta de la CUT, Bárbara Figueroa, ha señalado que si bien se analizó el momento de aplicar el voto universal, nadie propuso cómo se podría implementar ahora. Más bien, pone una mirada de largo plazo frente a este tema para crear las condiciones óptimas que permitan garantizar este tránsito de la forma correcta.
Lo concreto, es que diversos sectores disidentes de la Central aseguran que en marzo se reunirán y evaluarán las acciones a seguir de cara a la elección que se programó para abril. Esto, en medio de las primeras alertas que encendió Mario Aguilar desde el Colegio de Profesores al condicionar su permanencia en la multisindical, seguido por la Confusam, la Federación de Trabajadores del Cobre y la ANEF.
Además, comentan algunos dirigentes, el interés de la actual directiva sería solo ser ratificada sin poner acento en los cambios de fondo que requiere la Central.
Por esto, algunos sostienen que no será “nada fácil” para la actual dirigencia calmar los ánimos en marzo, en lo que será la antesala a la elección de abril. Nolberto Díaz, de hecho, ya ha respondido en redes sociales a algunos detractores asegurando que conversarán en marzo los cuestionamientos que se han desatado nuevamente en la CUT.
los hitos que han marcado la crisis interna de la central
25 agosto 2016 se realizaron las elecciones para elegir a la nueva directiva nacional que conduciría la CUT durante el período 2016-2020.
2 septiembre 2016 el Colegio Electoral de la CUT dio como ganador del proceso al dirigente socialista Arturo Martínez. Hubo cuestionamientos.
14 septiembre 2016 asume nueva directiva transitoria en la CUT con Bárbara Figueroa a la cabeza tras unirse la lista de la dirigenta con la de Nolberto Díaz.
27 octubre 2016 se constituyó formalmente una comisión investigadora de la Cámara de Diputados por la elección de la CUT, citando a la DT.
13 y 14 enero 2017 se realizó el Consejo Directivo Nacional Ampliado.
18 y 19 enero 2017 se efectuó la Asamblea Nacional del Colegio de Profesores donde se mandató a los delegados que asistan al Congreso de la Central a proponer desde la próxima elección el sufragio directo y universal del los órganos directivos de la CUT.
27 y 28 enero 2017 se efectuó el XI Congreso Nacional de la CUT donde se acordó realizar nuevamente los comicios en abril.
10 febrero 2017 la Confusam denunció "graves irregularidades" en congreso extraordinario de la CUT, anunciando que evaluarán permanencia en la multisindical. A esta acción se sumó la ANEF, que analizará este tema en abril.