El Índice de Percepción del Consumidor (IpeCo) que elabora mensualmente el Centro de Estudios de Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo (UDD), en conjunto con Mall Plaza, registró un pequeño retroceso de 2,9 puntos respecto al mes anterior, ubicándose en 132,4 puntos.
Estos resultados se explican por el subíndice Coyuntural que retrocedió 11,8 puntos, hasta 181,7, mientras el subíndice de Expectativas prácticamente se presenta sin variación, alcanzando los 114,8 puntos, 0,3 puntos mayor a lo observado en febrero.
Para entender la baja en el Índice Coyuntural, se debe observar qué sucedió con las variables que lo componen, es decir, desempleo actual y situación económica actual. En particular, la primera pregunta sufre el primer revés del año, ya que el aumento de optimistas (de 42,7 a 43,8%) no alcanza a compensar el aumento de pesimistas (de 17,2 a 19,4%) por lo que empeora la percepción de la pregunta. Con respecto a la situación económica actual, ésta se observa peor que el mes anterior. En este caso, disminuyen los optimistas de 35,4 a 31,9% mientras que aumentan los pesimistas de 12,4 a 15,6%.
A pesar de esto, el subíndice Coyuntural es 35,8 puntos mayor a lo observado en marzo de 2011.
Con respecto al Índice de Expectativas, que es el que pondera las variables de percepción acerca de la situación económica, desempleo e ingreso familiar, contempladas en un horizonte de 12 meses al futuro, se mantiene prácticamente sin variación, ya que es sólo 0,3 puntos mayor al mes anterior, alcanzando los 114,8 puntos.
La situación económica futura se muestra más pesimista en general que el mes anterior, dado que los optimistas caen 3,1 puntos porcentuales (de 58 a 54,9%) y los pesimistas aumentan 1,8 puntos (de 9,5 a 11,3%). En relación al desempleo futuro mejora la percepción, puesto que los optimistas aumentan 1,7 puntos porcentuales y los pesimistas retroceden 6. Con todo, sigue percibiéndose esta pregunta como optimista en niveles absolutos, puesto que los optimistas cuadruplican a los pesimistas. Por último, con respecto al ingreso familiar futuro domina el aumento de pesimistas (de 9 a 12,8%) por sobre el aumento de optimistas (de 53,8 a 54,5%).