Editorial

El sentido del “impuesto Google”

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n su reunión de la semana pasada en Francia, los ministros de Finanzas del G7 —las siete principales economías del mundo— acordaron impulsar la idea de establecer un impuesto para que las grandes empresas tecnológicas multinacionales tributen en los países donde realizan transacciones y generan ingresos, y no sólo en aquellos donde tienen oficinas físicas (que lógicamente suelen ser los de menor carga tributaria).

Se trata de un avance bienvenido, pues el alcance y volumen de los negocios de estas compañías —algunas de ellas entre las más grandes del planeta—, así como la complejidad de normar sus actividades sin desincentivarlas, han hecho de los impuestos digitales uno de los grandes desafíos regulatorios de la revolución tecnológica en curso.

Es muy posible de que el reciente anuncio de que Francia comenzará a cobrar este año el llamado Google Tax o impuesto GAFA (por las iniciales de Google, Apple, Facebook y Amazon) —España y Gran Bretaña debaten medidas similares— sirviera para resaltar la conveniencia de un enfoque mancomunado en esta materia. Tal vez comprensiblemente, Estados Unidos lo miraba con desconfianza, ya que la idea parecía apuntar en especial a empresas de ese país; sin embargo, la propuesta de mirar como referencia el régimen estadounidense GILTI —diseñado específicamente para inhibir el “dumping fiscal”— parece haber ayudado a aliviar las suspicacias de Washington lo suficiente para unificar posturas, al menos por ahora.

La economía digital está constantemente planteando nuevos retos al necesario esfuerzo por fijarle reglas —las criptomonedas son uno reciente, por ejemplo—. De hecho, la reforma tributaria que se discute en nuestro Congreso contempla gravar a las plataformas tecnológicas. Pero junto con ello es preciso entender que, por su naturaleza, estos sectores económicos requieren un enfoque regulatorio consensuado (y muy sofisticado) a nivel internacional. Puede que el acuerdo preliminar del G7 —que debería reflejarse en un informe de la OCDE a principios del próximo año— acerque ese objetivo.

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