Cecilia Cifuentes

Chile por el camino del cortoplacismo

Cecilia Cifuentes Directora Centro de Estudios Financieros ESE Business School

Por: Cecilia Cifuentes | Publicado: Martes 20 de agosto de 2019 a las 04:00 hrs.
  • T+
  • T-

Compartir

Cecilia Cifuentes

Cecilia Cifuentes

Argentina nuevamente al borde del abismo. Siempre privilegiando el corto plazo, durante los doce años de kirchnerismo dejaron de pagar la deuda externa, se robaron el ahorro previsional de los trabajadores y se gastaron toda la bonanza de los commodities. ¡El gasto público se multiplicó por más de 3 veces en términos reales! Una gigantesca fiesta fiscal. Cuando ya no quedaba de dónde seguir sacando “la guita”, llega Macri, que debía pagar la cuenta. Pero él prefirió pedir prestado al FMI, e ir muy de a poco recogiendo los miles de platos rotos. Su estrategia fracasó, y debemos aprontarnos al retorno del peronismo, que intentará seguir la fiesta de irresponsabilidad, probablemente con un nuevo default (ya lleva ocho en su historia), aunque difícilmente con la suerte de los doce años anteriores. Con razón el riesgo país ha vuelto a las nubes.

Imagen foto_00000001

¡En Chile estamos a años luz de Argentina! Somos vecinos, pero muy distintos en lo que se refiere a estabilidad macroeconómica en las últimas cuatro décadas. Sin embargo, desde hace un tiempo nos hemos empezado a contagiar esa nefasta enfermedad del cortoplacismo, luego de 30 años en que las políticas públicas se hicieron con una mirada de mediano plazo. Fue inevitable que los doce años de bonanza del cobre nos crearan la percepción de que se puede mejorar mucho en el corto plazo sin un gran esfuerzo. Es así como hemos implementado gratuidad en la educación, desincentivos impositivos a la inversión y la posibilidad de que los sindicatos puedan paralizar las empresas, por mencionar lo que me parece más dañino en una mirada de mediano plazo. Se podría sumar ahora la reducción de jornada, y lo que me parece más preocupante; la introducción de un “repartito” en la reforma previsional.

Y es que parece que en esa materia se está descubriendo un atajo; una vía rápida para mejorar las pensiones. La idea consiste en aumentar un poco más la cotización, 1,5 o 2 puntos, por supuesto de cargo del empleador, para financiar seguros de longevidad. Dado que ese pequeño reparto se hace cargo de las pensiones de cuarta edad ¡podemos inmediatamente subir las jubilaciones en un 20%! ¡Magia! Pero la magia no existe, aunque sí es posible estar mejor en el corto plazo, a costa de estar mucho peor después, los argentinos de esto saben. Incluso en el corto plazo este impuesto es muy distorsionador; primero, fomenta la informalidad al gravar sólo el trabajo formal, segundo es regresivo porque existe un tope imponible, y tercero es doblemente regresivo porque los que viven más son las personas de altos ingresos. En el largo plazo, la situación es peor aún, ya que la relación entre cotizantes y jubilados cae en forma significativa, sin duda será deficitario en el futuro. Sólo en la última década el cociente entre cotizantes de las AFP´s y jubilados del sistema ha caído de 5,5 a 3,8, a pesar de que ha sido un período de crecimiento elevado del número de aportantes. Los jubilados crecen mucho más.

Cuando se plantean estos puntos en contra, las respuestas son del tipo ¡Algo hay que hacer en el corto plazo por los jubilados! Por eso es bueno sacar lecciones de Argentina; lo que hay que hacer es decirle la verdad a la población, no engañarla con políticas que son pan para hoy y hambre para mañana. Vivimos más y el retorno de nuestros ahorros es más bajo; entonces debemos trabajar más tiempo, ahorrar más, y ser solidarios con nuestros padres, es la única solución viable, y que además de ser sostenible, es beneficiosa en el corto plazo, ¿o el trabajo, el ahorro y la verdadera solidaridad son perjudiciales para los países?

Lo más leído