Álvaro Clarke: “En el proyecto de gobierno hay riesgo de captura política y de integridad en el manejo de los recursos”

El ex superintendente de Valores y Seguros del gobierno de Ricardo Lagos y actual presidente de ICR Clasificadora de Riesgo, Álvaro Clarke, también tiene algo que decir en este debate. Para el personero de la otrora Concertación aunque es viable crear un nuevo ente para administrar el 5% de cotización adicional, el hacerlo conlleva un riesgo importante ya que puede ser foco de cuoteo político. Y más allá de eso, Clarke se pregunta si es necesario crear un organismo para este fin, si existen administradoras especializadas en el tema y que pueden hacer este trabajo sin costo.

-¿Es viable crear un fondo estatal como el que plantea el gobierno a un bajo costo y blindarlo de los riesgos políticos?

-Es totalmente viable, se puede diseñar a partir de lo que ha sido el modelo del Banco Central y aplicando de manera adecuada estándares de buen gobierno corporativo. Este nuevo organismo podrá externalizar funciones contratando servicios en el sector privado lo que podría ayudarlo a ser eficiente en términos de costos. Es un proyecto difícil y complejo, pero posible. Obviamente, tiene riesgos importantes asociados que van a comenzar a ser más nítidos cuando se deba definir en detalle cómo será la organización y su funcionamiento.

- A ¿qué riesgos se refiere?

-Por ejemplo, el de captura política y de integridad en el manejo de los recursos. Sin embargo, el tema de fondo es preguntarse si es necesario construir una entidad estatal como ésta cuando la gestión de esos fondos puede hacerse en el sistema de AFP sin mayor costo para los afiliados, aprovechando las economías de escala y alcance que están en el sistema, y sin aumentar la burocracia pública. Creo que, desde la perspectiva de la asignación de recursos públicos, que ya están estrechos, parece una iniciativa innecesaria e ineficiente.

-¿Considera que este proyecto lo que busca en el largo plazo es que finalmente todo el ahorro termine siendo administrado por el ente estatal?

-Es difícil determinarlo a priori. Sí creo que hay una parte de la coalición gobernante de la Nueva Mayoría que está convencida de que una larga lista de actividades económicas las debe emprender el Estado directamente y que definitivamente no cree en la colaboración público-privada. Esto se ha manifestado no sólo en el área de pensiones, también en salud con la reticencia de la actual administración a concesionar hospitales, aún a costa de retrasarse en la construcción de los mismos y privar a la población de soluciones efectivas a sus problemas. Posiblemente con esa visión ideológica ninguna carretera se hubiera concesionado en Chile y tendríamos un enorme atraso en infraestructura. La propuesta de pensiones del gobierno tiene la costosa restricción de tener que satisfacer esa particular visión, por tanto, lo relevante no es buscar la solución más eficiente sino aquella que satisfaga el acuerdo político al interior de la coalición, y esto implica acrecentar el rol del Estado como agente económico directo, no como regulador.

-¿Cómo evalúa la visión del ministro Valdés cuando dice que este ente se justifica en la medida que diversifica el riesgo al no tener todos los huevos en la misma canasta?

-No logro entender el sentido de la frase. Los huevos en los fondos de pensiones están diversificados en distintos fondos y administradores, países, monedas, renta fija y renta variable, etc. Todo de acuerdo a lineamientos de inversión que ha determinado el marco regulatorio y sujeto a fiscalización pública. Se trata de un sistema bien construido. Por el contrario, cuando se crea una institución nueva del Estado, legítimamente pueden aparecer dudas respecto a las ventajas comparativas del Estado para gestionar recursos de terceros e invertir en mercados financieros locales e internacionales; o respecto a la enorme cantidad de casos que hemos conocido de pensiones mal o ilegalmente pagadas por organismos públicos y que debemos financiar todos los contribuyentes. La pregunta de fondo es cómo se van a mitigar esos riesgos.

-¿Sería posible vía impuestos mejorar las pensiones actuales de los cotizantes del sistema de AFP con impuestos generales en vez de con cotizaciones?

-Es posible y es lo lógico. El tema central para aumentar las pensiones a los actuales jubilados o a un grupo de ellos es cómo financiarlo. Hacerlo vía impuesto implica que la sociedad aplica el mismo criterio de redistribución de recursos que ha ocupado hasta ahora, obteniendo recursos del contribuyente y distribuyendo de acuerdo al presupuesto público, que es donde la sociedad, a través de los poderes ejecutivo y legislativo manifiesta sus preferencias de gasto. Desde esta perspectiva, aparece inequitativo recargar sólo a los trabajadores formales una sobreprima de 2% destinada a pagar pensiones. Un principio fundamental es que el pilar solidario y los subsidios del sistema de pensiones se financien con rentas generales de la nación a la que contribuyen, con progresividad, los ingresos provenientes del capital y del trabajo, coticen o no coticen. Más aún, parece inentendible que el propio ejecutivo no contribuya con un esfuerzo para reasignar gasto público; si levanta fondos adicionales de la sociedad la contraparte mínima debe ser más eficiencia en el gasto.

Tema de campaña presidencial

-¿Qué le parece que no hayan llegado a un acuerdo político en la materia?

-Aquí hay un tema que es bien de fondo, que es que el hecho de imponer tantas restricciones a las soluciones, donde comienzan a primar posiciones ideológicas por sobre la búsqueda de acuerdos que tengan un alto componente técnico… todo eso me hace inferir a que es muy difícil que este proyecto vea la luz.

-¿Le preocupa en ese caso que sea tema de campaña?

-Probablemente hay actores más interesados en que esto sea un tema de campaña, pero lo que me preocupa, es que todos estos años el país ha ido deteriorando, por distintas razones, su capacidad de llegar a acuerdo en materia de políticas públicas.