Industria

Fondos de Brasil y Luxemburgo compran cadena de jardines infantiles Vitamina

Alejandro Bascuñán, Gonzalo Larraguibel, Eduardo Elberg e Ignacio del Río recibieron unos US$ 80 millones tras vender el 100% de la empresa.

Por: J. Troncoso Ostornol | Publicado: Lunes 4 de noviembre de 2019 a las 04:00 hrs.
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Foto: Rodolfo Jara
Foto: Rodolfo Jara

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Partió en julio de 2006 con un centro en el aeropuerto de Santiago. Hoy, la cadena de jardines infantiles Vitamina tiene 65 ubicaciones repartidas entre Valparaíso, Santiago, Rancagua y Concepción. Tan exitoso ha sido el modelo de negocio, que hace unas semanas, y bajo absoluta confidencialidad, dos fondos internacionales (de Brasil y Luxemburgo) concretaron la compra de la empresa, en una operación valorada en más de US$ 80 millones.

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Vitamina –cuyo objetivo inicial fue profesionalizar la formación preescolar- es una empresa ideada por el viñamarino Alejandro Bascuñán, ingeniero comercial de la Adolfo Ibáñez, mientras estudiaba un MBA en la Universidad de Harvard. Hijo de una educadora de párvulos, se inspiró en la firma estadounidense Bright Horizons, una red de salas cunas especializada en el cuidado de hijos de empleados de distintas empresas y organismos de gobierno, nacida en 1986 en Watertown, Massachusetts, y que hoy opera más de 1.000 centros en Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, los Países Bajos e India.

El modelo apunta a romper con la hegemonía del jardín infantil o sala cuna de pequeña escala fundado por educadoras de párvulos y formar una gran red que permite tener una línea educativa común y obtener importantes economías de escala.

La idea de Bascuñán de introducir este negocio en Chile sedujo a varios connotados empresarios locales. Así es como se sumaron a la iniciativa como socios Gonzalo Bofill (de Empresas Carozzi), Carlos Cáceres (director de empresas y académico), Antonio Cruz (ex Moneda y fundador de Aurus Capital) y Gonzalo Larraguibel (de Virtus Partners).

Tras lanzarse al mercado, la compañía comenzó a expandirse, para lo cual tomó varios jardines existentes y los convirtió bajo sus estándares.

Rápidamente, Vitamina se transformó en la red de jardines más grande del país.

La fórmula de la compañía ha sido crecer asociándose a empresas que requieren de este tipo de servicios para los hijos de sus trabajadores. Así, entre sus clientes figuran varios bancos, clínicas, empresas de tecnología y firmas de retail.

Cambio de socios

A comienzos de 2008 se incorporó a la propiedad el fondo de inversiones francés Axa Capital, que compró el 40% de la compañía, lo que resultó clave en la etapa de expansión. La firma gala concretó su desinversión en enero de 2016.

Un año después, entraron a la propiedad de Vitamina los empresarios Ignacio del Río y Eduardo Elberg, quienes les compraron sus participaciones a Gonzalo Bofill y Carlos Cáceres.

Elberg -ex dueño de la cadena de supermercados Santa Isabel, que vendió al grupo Cencosud- y Del Río -uno de los siete hermanos Del Río Goudie que integran el grupo controlador de Falabella- venían trabajando iniciativas en conjunto, principalmente en el área frutícola.

Con su ingreso a la red de jardines infantiles, esta empresa retomó su crecimiento. Hasta que llegó la oferta que atrajo a todos los socios.

Los nombres de los fondos de Brasil y Luxemburgo se mantienen bajo absoluta reserva, aunque se supo que el primero está ligado a una familia de alto patrimonio con intereses en el sector educación.

Internacionalización

Parte del acuerdo con los nuevos dueños de Vitamina es que su fundador, Alejandro Bascuñán, se mantenga en la administración de la empresa por un periodo determinado para apoyar el plan de crecimiento, el que considera la internacionalización de la cadena de jardines. Bascuñán no respondió a los llamados telefónicos de Diario Financiero.

No obstante, según personas al tanto de esta operación, el plan es exportar el modelo de negocio a nivel regional con el foco puesto en Brasil, donde se estima que existe un mercado potencial cinco veces más grande que el chileno.

A cargo de la internacionalización está Maurizio Fronza, que recaló hace unas semanas en Vitamina tras dejar la gerencia general de Glasstech, donde se desempeñó por casi siete años. Antes, fue vicepresidente de Virtus Partners y gerente general de la distribuidora Rabié.

Hace años que la cadena de jardines tenía en carpeta su internacionalización. De hecho, el plan era tener presencia en Perú o Colombia en 2015, lo que aún no ocurre.

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