El presidente de la Cámara de Diputados, Marco Antonio Núñez, salió a aclarar esta tarde la polémica que se generó en torno a préstamos que recibió un grupo de diputados por parte del Congreso, hecho que quedó al descubierto tras realizar una auditoría externa.
El parlamentario sostuvo que los dineros corresponden a "adelantos de remuneración" que se realizaban a los honorables que sufrían alguna eventualidad relacionada con "situaciones familiares o personales debidamente justificadas".
"Los diputados podían acceder a adelantos de las remuneraciones en casos calificados", reafirmó Núñez.
Con todo, el presidente de la Cámara aseguró que hace un año que ya no se realizan estos pagos. "En marzo del año pasado nosotros reafirmamos la decisión de la mesa anterior de terminar con los adelantos de remuneraciones", aseguró.
También aclaró que todos los recursos otorgados fueron restituidos. "Es una situación superada", dijo.
La auditoría, realizada por la consultora Ossandón&Ossandón, reveló que un grupo de seis diputados recibió un total de $ 104 millones en préstamos de dinero sin intereses ni reajustes por parte de la Cámara. Los créditos se entregaron hasta en 28 cuotas.
Los seis diputados
Si bien el parlamentario señaló que no se revelarán los nombres de los diputados que recibieron los dineros porque se trata de situaciones personales y del ámbito personal de los parlamentarios, Radio Bío Bío tuvo acceso a la información.
Según el medio, se trataría de Jaime Pilowsky (DC), Claudio Arriagada, Marisol Turres (UDI), Carlos Campos (PPD), Jenny Álvarez (PS) y Diego Paulsen (RN).
Consultado sobre la posibilidad de llevar estos antecedentes a la Contraloría o la justicia, considerando que los funcionarios de la administración pública no pueden acceder a créditos ni adelantos, Néñez comentó que "la Comisión Revisora de Cuentas tiene que tomar esas decisiones".